El proyecto de la junta vecinal para mejorar la calidad del servicio asciende a 66.500 euros
El agua de Combarros llega a los grifos sin proceso de cloración
La pedanía espera una ayuda de la Diputación para instalar el sistema de potabilización
La Junta Vecinal de Combarros espera la concesión de una ayuda para instalar un sistema de cloración en la red de abastecimiento de aguas que termine con los problemas de calidad del agua que llega a los domicilios. A principios del siglo XXI, en esta localidad del municipio de Brazuelo el agua llega del sondeo al grifo sin recibir aporte alguno de cloro. Así lo explicaban ayer el presidente del pueblo, Belarmino Domínguez, y la vocal de la junta vecinal Mari Carmen Alcalá, quienes manifestaron que desde hace meses trabajan para conseguir la cloración del agua del pueblo. De esta manera, ambos -además de compartir responsabilidades en la entidad local son matrimonio- mostraron el proyecto y la solicitud de subvención al Plan de Sequía 2007-2008, de la Diputación de León, que se presentó el 13 de diciembre, según indica el sello de la Administración provincial. Firmado por un ingeniero, el proyecto contempla una inversión de 66.500 euros, de los que 49.875 aportaría la hacienda provincial si otorgara una ayuda necesaria para ejecutar un nuevo depósito de agua con clorador. Los resultados Berlarmino Domínguez espera el inicio de esta semana para conocer el resultado del análisis de la Junta de Castilla y León, según los cuales no es apta para el consumo el agua de la red de abastecimiento. El pedáneo quiere contrastar la información y determinar si, efectivamente, como publicaba el sábado Diario de León, el nivel de bacterias en el líquido elemento supera en un 200% el límite permitido. En la carta que recibió del Ayuntamiento de Brazuelo, se indica, que los Servicios Farmacéuticos de la junta de Castilla y León detectaron «la existencia de bacterias coliformes en el agua», motivo por el que se insta a la junta vecinal a clorar el agua o a revisar los sistemas utilizados en esta operación, además de advertir que el agua no es apta para el consumo humano. dicho documento salió del Ayuntamiento «el 18 de marzo por correo ordinario, por lo que a nosotros nos llegó dos o tres días más tarde», indica Carmen Alcalá. Al conocer la existencia del problema, la junta vecinal optó por solicitar presupuestos a una empresa de gestión del agua para la limpieza y desinfección del depósito de agua y para la instalación de sistemas de cloración. La firma ofrece tres cifras a la pedanía: 450 euros por la limpieza, y 662 o 2.802,25 euros por el sistema de cloración, dependiendo del sistema elegido -manual para la primera cantidad, automático en la segunda-. Domínguez insiste en que la pedanía asumirá instalar un clorador una vez que se conozca si Diputación incluirá la solicitud del pueblo en la convocatoria del plan de Sequía: «No vamos a instalar un clorador para que luego nos den una subvención que contempla su pago», señaló. La pedanía señala su interés por conseguir la subvención, al suponer «un arreglo definitivo para todos». «Los análisis de la Junta superaban el nivel de bacterias por lo mínimo, según nos han dicho» «El depósito de agua no se ha limpiado desde hace cuatro años» BELARMINO DOMÍNGUEZ Pedáneo de Combarros