«Los vecinos que estén tranquilos con la salud, porque la cocombustión no les afecta»
La cementera alega que la valorización de residuos no es peligrosa para la salud
Tiene previsto instalar una tolva con tres cintas cubiertas para la quema de residuos Un proceso más res
La valorización se realizará en dos tolvas cerradas como todo el sistema actual
La dirección de la empresa cementera Tudela Veguín de La Robla quiere dejar claro la valorización energética que se va a producir en la empresa es un procedimiento que permite el aprovechamiento de los recursos contenidos en los residuos sin poner en peligro la salud y sin utilizar métodos que puedan causar perjuicios al medio ambiente. De hecho, el director de la cementera roblana, Pedro de Lama, aseguró ayer que el proceso de cocombustión se va a realizar en la industria desde el momento en que tengan la autorización pertinente «porque los permisos medioambientales ya están autorizados desde la Junta de Castilla y León y va a consistir en la instalación de una tolva y tres nuevas cintas cubiertas para poder introducir en el precalcinador los elementos a quemar que serán maderas no tratadas y neumáticos». Un proceso relativamente sencillo que se está empleando en muchas fábricas cementeras en Europa en el que entraría a la torre de precalcinación un total de cuatro toneladas a la hora como máximo en una triple trapleta, para que no exista ninguna fuga de aire, y que entraría a la cámara de combustión a 1.200 grados centígrados, lo que supondría un kilo por segundo del material valorizable. Desde Tudela Veguín se insiste en que «todo el mundo dice que es contaminante pero hay que demostrarlo» y aseguran que a la temperatura que se alcanza en el horno donde se quema la harina de crudo para la producción del clinker alcanza esos 1.200 grados». Desde la compañía, se insiste en que «no se trata de una incineradora» y argumentan al mismo tiempo que «el 92% del material que entra en el horno de cocción tienen que ser materias primas para la obtención del cemento y el 8% restante se suple actualmente con coke». La dirección de la compañía cementera quiere dejar claro que van a existir más controles a la hora de los procesos de eliminación de resíduos y destaca que «los residuos no son peligrosos en ningún momento para la salud».