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Tres años de lucha baldía

Un matrimonio confiesa sentirse indefenso ante la Administración después de plantear continuas quejas contra una nave ganadera ubicada a escasos metros de su vivienda

Publicado por
Maite Almanza - murias de pedredo
León

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Aureliano Domínguez y su esposa Elvira Pasamar residen varias temporadas al año en Murias de Pedredo, una pedanía del Ayuntamiento de Santa Colomba de Somoza. Hace tres años que iniciaron una lucha administrativa en busca de soluciones a las molestias que, según dicen, les ocasiona una nave de ganado ovino situada a pocos metros de su casa. Este matrimonio acusa al propietario de la explotación de trasladar a sus ovejas por calles del pueblo sin asfaltar y de no limpiarlas después, o de depositar en la calle el abono y las ovejas que mueren a la espera de que tanto uno como otras sean retiradas. «Vivimos durante todo el año en un estercolero que produce malos olores, pulgas y es un foco de infecciones», aseguran en una de las quejas tramitadas en el 2005, por lo que plantean que el ganadero construya una nueva nave fuera del pueblo o, en su defecto, abra una puerta en la trasera de su explotación, que da a un camino, para sacar por esta zona su ganado. Los denunciantes comunicaron el caso al Procurador del Común, que en junio del 2007 archivó el expediente, no sin antes señalar que el Ayuntamiento de Santa Colomba de Somoza no había respondido a sus reiteradas demandas de información. Tampoco las quejas que Domínguez y Pasamar, que llegaron a recurrir a la Guardia Civil, plantearon ante el Ayuntamiento tuvieron éxito. Mientras, el servicio territorial de Sanidad de la Junta, que, tras una visita al pueblo en noviembre del 2005 constató que la calle que conduce a la nave estaba repleta de excrementos de ovejas, propuso como medidas correctoras la limpieza de dicho vial y la búsqueda de una ruta alternativa para el ganado, pero trasladó la competencia para actuar en este caso al consistorio. El tiempo ha pasado y los afectados aseguran que la situación no ha cambiado de manera sustancial. «A veces no podemos ventilar las habitaciones por malos olores, nuestros tres nietos pequeños no pueden salir ni a la calle. Nos sentimos indefensos porque nadie nos hace caso», señala Elvira Pasamar. Mientras, el ganadero atribuye estas denuncias a supuestos problemas personales con el matrimonio, y señala que «entre junio y septiembre las ovejas están en el monte», y que «la nave tiene las licencias correctas». El propietario del ganado señala que para utilizar una ruta alternativa para sus ovejas «tendría que comprar un terreno para sacarlas de la explotación», y asegura que barre la puerta cuando aquéllas salen de la nave. El alcalde de Santa Colomba de Somoza, José Miguel Nieto, indica que «el Ayuntamiento viene haciendo un seguimiento del problema y contactando periódicamente con el ganadero, y espera una solución en breve», y precisa que éste, que está próximo a jubilarse, tiene en tramitación un expediente de licencia ambiental.