La Junta sondea arqueológicamente el suelo de la Ferrería de San Blas de Sabero

La Junta de Castilla y León está llevando a cabo la realización de unos sondeos arqueológicos en el hábitat exterior del emblemático edificio de la Ferrería de San Blas, antes de iniciar su adecuación para la próxima puesta en marcha del Museo de la Siderurgia y la Minería, que aún no cuenta con fecha definitiva para su apertura pero que todo indica que está próxima, dado que se están realizando los trabajos finales en todo el entorno. Las intervenciones, llevadas a cabo por la empresa «Terra-Arqqueos» están consideradas como preventivas y que se hacen para conocer si hay alguna estructura especial que esté relacionada con lo que fue la Ferrería de San Blas. Los trabajos se circunscriben a la parte norte de la Ferrería, lindando con el camino hacía la Ermita de San Blas, donde antiguamente existían edificios auxiliares de la empresa minera «Hulleras de Sabero», y en la solera de lo que fue el frontón, «en la parte oeste del edificio junto al ya popular cubo de hormigón. Quince días de duración Los trabajos tienen una duración de quince días, ya próximos a finalizar y, posteriormente el equipo de arqueología emitirá un informe valorativo que hará llegar a los responsables de la Junta de Castilla y León. En una primera valoración la coordinadora de los trabajos puso de manifiesto que «han aparecido algunas estructuras de poca entidad, encontrándose material de hierro de la antigua Ferrería, como clavos, enganches, etc.». En cuanto a las estructuras se tratan de restos de cimentaciones y soleras de éstas de edificios que debieron existir en épocas anteriores. Ahora parece que ya va en serio y la Junta quiere que esté todo ultimado y puesto en funcionamiento para el día de la inauguración, máxime teniendo en cuenta que, sino surgen imprevistos de última hora, la representación de la Junta correrá a cargo de varios consejeros. Así se desprende de los numerosos operarios y pequeñas empresas que entran y salen de las instalaciones de la Ferrería, así como la puesta en funcionamiento de todos los servicios y la reparación de pequeños desperfectos que han surgido desde que finalizaron las obras del proyecto museográfico en el mes de diciembre del pasado año. Treinta y cinco luceras Sin duda alguna lo que más llama la atención es el cambio de los cristales de las 35 luceras del edificio de la Lonja de Laminación y alas adicionales, por otros de más grosor colocados de forma que eviten las filtraciones ó humedades que se han venido produciendo en los meses de invierno y lluvia. Además se están repintando los protectores de los arcos ojivales laterales y reponiendo alguno de los cristales que estaban rotos o rajados. ¿Qué hacer con el cubo? También se iniciarán los trabajos de limpieza y adecuación de los alrededores del Alto Horno, lleno de matorrales, arbolados y otras plantas, hasta su conexión con el camino de la ermita, la adecuación del terreno que rodea al cubo de hormigón que, al día de la fecha, no se le conoce destino o función dentro del conjunto museístico. Estos trabajos están siendo ejecutados por la empresa local «AQA» que también ha intervenido en la rehabilitación de la Ferrería y otros trabajos relacionados con el Museo. «Han aparecido algunas estructuras de poca entidad y, sobre todo, material de hierro de la antigua Ferrería» COORDINADORA DE LOS TRABAJOS DE SONDEO