El Ayuntamiento invertirá en agua casi el sueldo anual de sus ediles

El Ayuntamiento de Valderrey invertirá unos mil trescientos euros durante las tres semanas que, previsiblemente, durará el reparto de garrafas de agua entre sus vecinos, según confirmó el alcalde, Gaspar Cuervo, después de que la Diputación decidiera suspender dicha distribución por considerar que el agua que aquéllos reciben en camiones cisterna es potable. El regidor indicó que el suministro de agua por este sistema se prolongará hasta que empiecen a funcionar las nuevas potabilizadoras, aunque matizó que «si por algún problema éstas entran en funcionamiento más tarde este gasto se vera incrementado». El primer edil afirmó que la citada cantidad de dinero corresponde casi al sueldo de los siete concejales de la corporación municipal durante un año. «Para un Ayuntamiento tan pequeño como el de Valderrey este dinero es muy importante, tenemos muchos proyectos que tendremos que dejar un poco de lado debido a este gasto inesperado pero tan necesario», advirtió Cuervo. El consistorio comenzó ayer a repartir entre los vecinos agua en garrafas. «Cada vecino de Castrillo de las Piedras y de Tejados recibe 2,5 litros de agua por persona y día», especificó el alcalde. En este primer reparto el Ayuntamiento ha dotado a los dos pueblos con un total de 450 garrafas. Los afectados recibirán una nueva remesa el domingo. El alcalde señaló que las potabilizadoras comenzarán a funcionar la semana próxima, pero aclaró que los vecinos deberán esperar al resultado de los análisis, incluido el de arsénico, para, si es correcto, empezar a consumir el agua que liberen dichas instalaciones. Valoraciones Mientras, el alcalde admitió que esta medida tomada por el Ayuntamiento supone «un esfuerzo muy importante». «Los ingresos de Valderrey son muy bajos y tenemos muchos proyectos pero esta solución es una medida de primera necesidad debido a que no vamos a dejar que nuestros vecinos consuman agua que puede estar contaminada», matizó el regidor. El alcalde también quiso recalcar que no tomará ningún tipo de medida contra la Diputación. «Esta institución no tiene la obligación legal, pero sí la moral, de colaborar con nosotros, como bien dijo el Procurador del Común, y lo que ha hecho es dejar de repartir agua alegando que los análisis decían que era potable, cuando la institución provincial no ha analizado los índices de arsénico» matizó el regidor. El regidor concluyó rogando a los vecinos que, aquéllos que todavía tengan garrafas de agua entregadas por la Diputación, las utilicen y no hagan acopio de ellas. «Nosotros garantizamos el suministro de agua a todos los vecinos hasta que podamos consumir el agua de las potabilizadoras», apuntó.