El Ayuntamiento lo justifica, «porque había que aprovechar la novedad de las instalaciones»
El cámping lleva funcionando dos veranos sin licencia ambiental
El Boletín Oficial de Castilla y León publicó ayer la Declaración de Impacto Ambiental
La Declaración de Impacto Ambiental del proyecto del campamento municipal de turismo de segunda categoría de La Bañeza ha sido oficialmente aprobada según salía publicado en el Boletín Oficial de Castilla y León del día de ayer. La resolución fue transmitida al consistorio el pasado mes, pero ahora el documento se hace público. Teniendo en cuenta que el cámping municipal abrió sus puertas en julio del año pasado, el recinto llevaría ya dos veranos funcionando sin licencia. La corporación municipal justifica esta circunstancia declarando que a la vez que tramitaban la licencia, mantenían el cámping en uso, «para aprovechar la novedad de las instalaciones». Además, el consistorio ya había recibido 50 peticiones para utilizar el cámping en el mes de junio del 2007. Tal y como explicó a este periódico Eduardo Fernández, delegado Territorial de la Junta, «los especialistas de la Junta realizan las tareas de evaluación medio ambiental de los proyectos, ya que los ayuntamientos no cuentan con esa capacidad técnica». Fernández continúa que el proceso de evaluación de la Junta establece las medidas protectores y correctoras concretas para cada proyecto, los condicionantes obligatorios para que el proyecto sea lícito a la hora de ponerlo en marcha. Así lo refleja el documento publicado ayer por el organismo autonómico, en el que prevé doce medidas protectoras y correctoras para el cámping municipal de La Bañeza. El trámite El proyecto evaluado, calificado como favorable, corresponde al definido en el proyecto de ejecución de campamento de turismo de segunda categoría y piscina, con fecha de marzo del 2008 y al Estudio de Impacto Ambiental de julio de 2007. La tardanza de los trámites burocráticos fue agravada por motivo de un cambio en la legislación, por lo que el informe remitido a la Junta por el Ayuntamiento debió de ser redactado de nuevo para adaptarlo a las nuevas exigencias legislativas. Además de la Junta, el Servicio Territorial de Fomento, la Subdelegación de Gobierno y la Confederación Hidrográfica del Duero también realizaron informes sobre el proyecto del cámping.