Vía muerta

QUERIDO HERMANO: Después de tantos años algo se mueve. Algunos hemos estado en el ajo reivindicativo desde mucho antes; desde siempre. La Vía de la Plata, ahora en vía muerta, ha hecho correr ríos de tinta sin que algunos, como ese ente denominado Red de Ciudades en la Ruta de la Plata, se den por aludidos. Y es que manejan plata a mogollón para intereses espurios. Juanjo, como lÍder de los Pueblos en Defensa de la Vía de la Plata ha saltado una vez más a la palestra zurrando a su correligionario Paco Raquetas . Pues ahora, el edil leonés, con fiebres regionalistas, quiere alzarse con el santo y la limosna haciendo el caldo gordo a los asturianos y otros apañaos . Cuando el leonés anda a mamporros con León de la Riva y cuanto nada en el Pisuerga, él emplea las mismas artimañas de las que acusa al vallisoletano; como hace éste a favor de Valladolid lo aplica él en esta provincia y quiere arrebatar protagonismo e historia a unos cuantos pueblos desviando y desvirtuando una vía histórica y tradicional. Y no te cuento los enjuagues de responsables autonómicos que bien los sabes. Días pasados andábamos una gavilla de platenses predicando en la portuguesa Penafiel, donde se celebraba un congreso sobre los caminos jacobeos. La Vía de la Plata era protagonista principal junto con los caminos portugueses. Llegado que fue el turno a los de Salamanca, Zamora y León -por motivos de salud falló el representante de Cáceres- se dejó bien sentado que la Vía de la Plata es una, y nada más; que discurre entre Mérida y Astorga; y que los demás caminos, sendas y entronques son hijuelas convergentes a la vía; que se les denominen como quieran pero nunca arrebatando la identidad del camino original, como está ocurriendo hacia Asturias y Galicia, con el consentimiento de instituciones estatales y autonómicas. Y se armó el Cristo, hermano; dos representantes de Asturias, que sabes tienen las bendiciones de Tinín Areces, como promotores del alargamiento viario, sulfurados y poco elegantes se fueron de la sala. No así los de Galicia que permanecieron en sus asientos con ecuanimidad. Ejemplo dio el delegado de Sevilla quien en su exposición dejó sentado que ellos denominan, y denominarán, su trayecto hasta Mérida como Camino Peregrino Mozárabe. Bien es cierto que la sangre no llegó al Tajo, pero los asturianos siguen enrocados en apropiarse de lo que no les corresponde. Parece que es un largo calvario el que hemos de sufrir si queremos que al final triunfe la verdad. Algo se mueve, sí. Ahora, querido, las Cámatras de Comercio que tienen asiento en la Vía de la Plata, a propuesta de la de Astorga, inician como has visto una campaña para la recuperación de la línea férrea, la llamada del Oeste. Lo que llevamos años pidiendo algunos, y hasta suplicando, la apertura del ferrocarril, es planteado por las Cámaras, como eje económico y dinamizador de la zona. Recuerda que Felipe González echó el cerrojo a esa vía; el partido mayoritario en la oposición clamaba por su apertura; llegó Aznar a la presidencia y se olvidó de aquellas peticiones, las cuales hicieron suyas los socialistas ni se sabe con qué intenciones. Zapatero, muy cuco, tomó esa apertura como buen huerto de votos en 2004; se lo creímos; ganó, volvió a ganar y así estamos, como en 1985. La iniciativa cameral ya ha sido apoyada por diversas asociaciones. Todos los municipios y pueblos entre Plasencia y Astorga debemos estar a su lado; presionar con todos los medios ante los responsables y exigir lo que es nuestro, así como el cumplimiento de una promesa olvidada. La falacia electoral hay que desterrarla.