| Reportaje | Adiós al Belén de Antonovich |
Un belén único para un «museo extraordinario»
Las ciento cincuentas piezas del nacimiento napolitano que cedió el mecenas se retiran de la Ferrería de San Blas tras su buena acogida
corresponsal | sabero
El historiador y anticuario Francisco Antonovich visitó el viernes el Museo de la Siderurgia y la Minería de Castilla y León para ver el Belén Napolitano que se exhibe en este museo desde la Navidad del año pasado.
Antonovich estuvo acompañado del escultor de origen español aunque afincado en París desde hace años, Ángel Peres, autor de «la puesta en escena» de las figuras del Belén y de Jesús García Recio, Director del Instituto Bíblico y Oriental, entidad con la que el museo ha realizado de forma conjunta esta exposición.
El anticuario y mecenas se mostró gratamente sorprendido de la ubicación de su Belén bajo los arcos de la Ferrería de San Blas, edificio neogótico del siglo XIX declarado Bien de Interés Cultural con categoría de monumento.
«Es un enclave magnífico y me alegro de que la gente de esta montaña haya tenido la generosidad de acogerlo y la posibilidad de disfrutarlo» comentó.
«Moderno y didáctico»
Antonovich también tuvo palabras de reconocimiento hacía el museo «es un centro extraordinario, no solo por el edificio sino también por la museografía, se trata de uno de los museos mas modernos y didácticos de Europa».
Con esta visita, Francisco Antonovich cierra sus actos en España, desde que el día 11 de este mes asistiera a la inauguración de la sede del Instituto Bíblico en León, presidida por la Reina Doña Sofía, que coincidió con la inauguración también de la exposición temporal «El itinerario religioso de Alejandro Magno», compuesta por ciento setenta piezas propiedad de Antonovich, una de las mejores colecciones del mundo sobre el gran emperador.
El Museo de la Siderurgia y la Minería de Castilla y León decidió prorrogar la estancia del Belén atendiendo a la buena acogida mostrada por el público y para dar la oportunidad a los centros escolares que durante estos meses visitan el museo de conocer esta obra de arte.
Se trata de un Belén formado por ciento cincuenta piezas, ricamente decoradas, fruto de la pasión de Antonovich por estos Belenes y de cincuenta años de búsqueda y adquisiciones.