La planta de Fundosa tramita ante la Junta su consideración como centro especial de empleo
Reciclalia comienza a funcionar en pruebas tras invertir 9 millones
La empresa contará con diez empleados a final de abril y espera llegar al medio centenar
Las ramas de un olivo enmarcan el rótulo de la entrada principal a la planta bañezana de reciclaje
la bañeza
Tras una inversión de nueve millones de euros -”medio millón más de lo anunciado en octubre del 2007 y cantidad que la empresa considera provisional-” la primera planta de gestión de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (raee) del grupo Fundosa, Reciclalia, ha comenzado a funcionar en pruebas con el inicio de este mes.
Se trata de la empresa que más extensión ocupa en el polígono de Villa Adela, 10.000 metros cuadrados, y tiene previsto llegar a dar empleo a medio centenar de personas, aunque, según el gerente de Reciclalia, Carlos Gutiérrez García, la contratación se realizará de forma gradual, a medida que vaya escalando la producción.
Por el momento, en la planta de reciclaje han empezado a trabajar tres personas y las próximas incoproaciones a la plantilla «se realizarán de manera gradual, porque depende de la puesta en marcha de la maquinaria». Así, a mediados de este mes podrían entrar a trabajar en los lineales de la empresa «tres o cuatro personas más y, luego, otras dos o tres, para llegar a diez en el mes de abril», explicó el gerente.
La actividad de Reciclalia depende, en buena medida, de la concesión de licencias, explicó Gutiérrez. Por el momento, la empresa dispone de permiso para trabajar en pruebas, por lo que «llegar a las 45 o 50 personas que trabajarán en Reciclalia depende, en buena medida, de la las licencias definitivas», aunque, en principio, la idea de la nueva empresa del Grupo Fundosa prevé un ritmo de contrataciones de «una o dos personas al mes, en función del negocio».
Centro especial de empleo
Gutiérrez señaló que ya se encuentra en trámite la solicitud para que Reciclalia se convierta en centro especial de empleo, con una plantilla en que más del 70% esté formada por personas con discapacidad, proceso que también «depende de la las solicitudes de licencias, que, hasta hace dos semanas, no teníamos».
Con todo el equipo preparado ya para funcionar, la primera línea en probarse con carga será la de frigoríficos y congeladores.