El Ayuntamiento anuncia la creación de un grupo de protección civil que supla esta falta
Los bomberos carecen de un seguro que cubra los riesgos de su actuación
Cinco voluntarios atienden el servicio de extinción de incendios en La Bañeza
Los voluntarios de La Bañeza atacan el fuego en la cubierta de una vivienda, en una foto de archivo
la bañeza
Los cinco bomberos voluntarios del Ayuntamiento de La Bañeza carecen de un seguro que cubra los daños que puedan sufrir en la atención de un siniestro, según indicó el alcalde de La Bañeza, José Miguel Palazuelo, que señaló que la próxima creación de un grupo local de protección civil podría paliar en algo esta carencia.
En caso de accidente, el Ayuntamiento de La Bañeza podría enfrentarse, mientras no se subsane la situación, no sólo al pago de la asistencia médica que reciba un voluntario accidentado, sino a las indemnizaciones que se le reclamen por este concepto.
«Ellos conocen hasta dónde pueden llegar, tienen muy claros los límites, y hacen todo lo posible por solventar las situaciones de emergencia, aunque sin exponerse», indica Palazuelo, que recuerda la última intervención de los voluntarios, que tuvo lugar en un almacén de legumbre y, al parecer, estuvo causado por un compuesto químico: «Esperaron la llegada de los bomberos del parque de León, que llevaron el peso de la intervención, mientras ellos colaboraron en lo que pudieron».
El personal
De los cinco bomberos voluntarios -”no existe parque profesional en La Bañeza ni en la zona-”, dos son empleados municipales, mientras que otros tres no mantienen relación contractual alguna con el consistorio. Todos ellos reciben una gratificación por el servicio.
«Cuanto más hablamos del servicio de extinción de incendios, más argumentos aparecen para buscar una solución», señala Palazuelo. El regidor bañezano invita a la Diputación provincial a «facilitar unos plazos. Igual no puede asumir la construcción de parques de bomberos este año, pero se puede elaborar un calendario», indicó.
El alcalde de La Bañeza advierte de la posibilidad de que se produzcan «decisiones arbitrarias» a propósito de la ubicación de los parques comarcales de bomberos y exige que ésta se fundamente «en criterios técnicos» frente a posibles «objetivos electoralistas».