La alcaldesa niega irregularidades en el cobro de tasas municipales

redacción

La alcaldesa de Benavides de Órbigo, Rosa Sopeña, desmintió ayer la existencia de irregularidades en el cobro de la tasa de alcantarillado del municipio, en respuesta a una acusación del Grupo Socialista en la oposición, que denunció que el equipo de Gobierno había cobrado cuatro veces más de lo estipulado en las ordenanzas a los vecinos de las localidades de Benavides y Gualtares de Órbigo.

Según la alcaldesa, la modificación de la ordenanza se aprobó en diciembre del 2006, «con el voto unánime de todos los asistentes, entre los que se encontraban dos de los tres concejales que firman la moción».

Sopeña añade que se abrió un plazo para formular reclamaciones y que no se presentó ninguna alegación por lo que «no entendemos por qué se quiere confundir a los vecinos y sembrar dudas sobre cuestiones que ellos mismos han aprobado».

La alcaldesa reitera que «no se discrimina a nadie, puesto que los costes son diferentes en cada pueblo. Hasta este año cada pueblo pagaba el canon de vertido a la Confederación Hidrográfica del Duero, pagando el Ayuntamiento el de la localidad de Benavides cantidades desde 25.369 euros en el año 2007 hasta 16.000 en el año 2009».

Rosa Sopeña señala que «por las obras de reparación de redes de alcantarillado que se hacen en la localidad de Benavides no se cobran contribuciones especiales pagándose una parte de éstas con dicha tasa de alcantarillado». Además, la alcaldesa quiere dejar claro que «no tenemos ningún afán recaudatorio, de hecho siempre que es posible reducimos las tasas y más en épocas de crisis como la actual. Somos especialmente sensibles con los ciudadanos, como lo demuestra el hecho de que en el último pleno se redujo la tasa de la Escuela de Música para el curso 2009-2010 en casi un 50 por ciento, pasando de 45 euros mensuales a 25 euros mensuales.