Toros y rock, una fórmula perfecta

La localidad de Pobladura de Pelayo García se vio el viernes desbordada ante la masiva afluencia de público al festival de rock y al primero de los encierros taurinos nocturnos.

Los leoneses Karbon 14 fueron los primeros en saltar al escenario para que la gente empezase a calentar. La apoteosis llegó con la actuación de los riojanos Piperrak. La plaza Mayor de la localidad se llenó a rebosar. Cerca de 4.000 personas se hartaron de corear las canciones, saltar y bailar. El tono fiestero de las melodías hizo el resto. En total, más de dos horas de actuación en las que el grupo punk-rock repasó todos sus temas.

Después tuvo lugar el primero de los encierros taurinos por las calles de la villa.

En la plaza de toros no cabía un alfiler y en las calles del recorrido sucedía lo mismo. En este sentido cabe lamentar que el novillo contrato no pudo salir de los chiqueros al romperse una pata en el traslado. La organización hizo todo lo posible por sustituirlo por otro pero fue imposible hacerlo para esa noche del viernes. En cambio si se trajo otro novillo para los encierros de la madrugada del sábado y de la tarde del domingo.

Por lo demás esa noche del viernes transcurrió sin ningún incidente destacable en el concierto ni en el encierro.

La jornada de ayer, sábado, incluyó en el programa la actuación un grupo de teatro de calle que, a tenor de los aplausos, fue del agrado del público. Después se llevó a cabo una exhibición de cetrería. De noche la orquesta Noa Noa puso las notas musicales a la verbena. Mientras, frente al bar Tomás tuvo lugar un festival de rock. De madruga se celebró el segundo de los encierros.

El programa de hoy domingo cuenta con los partidos de pelota a mano a partir de las seis de la tarde. También habrá juegos infantiles y magia. El tercer encierro urbano pondrá el punto final a las fiestas del Corpus a las ocho de la tarde.