¿Es posible resucitar un pueblo?

Prada de la Sierra, en Santa Colomba de Somoza, se apagó hacia 1980 y ya hace cuatro años que los hijos de este pueblo maragato intentan levantar sus ruinas, arreglando casas y celebrando hacenderas con las que arreglar espacios comunes.

Carece de abastecimiento y saneamiento de agua, suministro eléctrico y alumbrado público y la totalidad del pueblo se encuentra sin asfaltar. En la actualidad, es posible acceder en coche hasta Prada por una pista forestal, acondicionada para el mantenimiento de parque eólico.

Los herederos del éxodo rural se agruparon en la Asociación nueva Prada de la Sierra, con el fin de dar vida a las propiedades que allí tienen. Desde entonces, el enfrentamiento ha sido continuo con un Ayuntamiento que ve con recelo desviar fondos a los servicios del que sería décimo séptimo núcleo de su territorio. Sin embargo, podría llegarse a un acuerdo. El pasado 22 de julio representantes de ambas partes se reunieron para abordar el asunto y el ayuntamiento lanzó una propuesta que, por el momento, el grupo analiza.

Se trata de que quienes deseen asentarse en el municipio se hagan cargo del coste de dotarlo de los servicios urbanísticos, cuyo mantenimiento asumiría el municipio.

«Basta que el Ayuntamiento se haya sentado a hablar con nosotros para que no digamos que no a su propuesta», indicó ayer el presidente de Nueva Prada de la Sierra, Ernesto Morán. El consistorio tendrá su respuesta una vez que el grupo decida si puede asumir los servicios. En caso contrario, «adoptaremos otras medidas», que no excluyen las movilizaciones. Morán considera que resucitar el pueblo antes de que termine en el suelo hasta la última piedra es un bien para el municipio y la comarca.

El alcalde, José Miguel Nieto, señala que la propuesta no hace más que plasmar «lo que indica la ley».