Reportaje | j.a. barrio planillo
Pendones y oficios en Boínas
Los deportes autóctonos no faltaron en la fiesta patronal de Matallana de Torío
Varios romeros observan el trabajo de un herrero en la explanada del santuario.
La tradicional romería en el Santuario de Boínas, patrona de Matallana de Torío, se llenó ayer de gente para duisfrutar de un auténtico día festivo. Un año más cientos de romeros se congregaron en la explanada del recién restaurado templo de Robles de la Valcueva.
En una jornada que comenzó a primeras horas de la mañana con una procesión de la patrona a hombros desde la iglesia parroquial hasta la ermita, donde se concelebró la misa solemne en el día de nuestra Señora de la Asunción.
Cada año por estas fechas la tradicional reúne no sólo a los fieles, sino, también, a otra multitud, procedente de diferentes puntos de la provincia, que compartieron mantel y comida en la gran explanada. No obstante, la organización repartió más de mil raciones de paella una vez que los asistentes pudieron degustar el tradicional plato típico de bonito regado con sidra y vino freco.
Una de las principales nobvedades de este año fue la concentración de más de veinte pendones, que acompañaron a la Virgen y se bailaron en la campa del santuario. El colorido en los paños lo puso la Asociación de Pendones del Reino de León.
A la jornada se sumó una tormenta que descargó en media hora, pero no impidió que la fiesta continuase durante la tarde de ayer.
Satisfacción municipal. El programa vespertino contempló la celebración de los deportes autóconos, con la celebración del concurso de bolos, que repartió importantes premios en metálico y la exhibición de lucha leonesa. El alcalde de Matallana, Efrén Aldeano, recordaba ayer que la Diputación de León ha puesto en valor esta romería popular al declararla de interés turístico provincial.