Los saldos sortean la crisis

La feria de stock celebrada este fin de semana en La Bañeza finalizó ayer con gran éxito su cuarta edición. La muestra, que otros años se desarrollaba en el Pabellón del Colegio José Calasanz, estuvo situada en la plaza Mayor. El Ayuntamiento colocó para ocasión quince casetas destinadas a los comercios participantes en la feria. Así pues en pleno centro bañezano, los vendedores contaron con una gran afluencia de vecinos de la zona y de veraneantes.

La feria, que tiene como fin dar salida a las existencias no vendidas durante el año, fue presentada el pasado sábado por José Miguel Palazuelo, alcalde de La Bañeza, quien afirmó que con el encuentro «se busca dinamizar el pequeño comercio». Debido a este motivo, según Palazuelo, la decisión de cambiar este año la ubicación de la feria repercute en que «se vea más y sea más accesible al público», además desear «favorecer a otros negocios, especialmente al sector hostelero». Del mismo modo, las decisiones tomadas por el Ayuntamiento están destinadas a que la feria se consolide.

Entre los principales artículos que se podían encontrar en la cuarta edición predominaban los productos textiles, aunque el público también podía adquirir materiales de decoración, perfumes e incluso utensilios de bricolaje, todos ellos a un precio inferior al que tuvieron en temporada. Así pues, pese a que la crisis azota a todos los sectores y a todos los bolsillo, comerciantes y familias encontraron este fin de semana en La Bañeza su reconciliación.