Parrilladas, sopas de ajo y chocolate para La Virgen de la Portería

En los últimos días del verano, cuando ya se ve llegar el otoño, la localidad de Galleguillos de Campos dispone de un completo programa festivo para honrar a la Virgen de la Portería. Días de alegría y diversión desenfrenada, nadie en el pueblo se siente forastero desde que comenzaron las fiestas el pasado viernes y hasta que éstas concluyan mañana.

Parrilla de chorizo y panceta, acompañados de buenos caldos y a precios populares aderezan a las celebraciones religiosas, en las que conviene no olvidar que en el hombre espíritu y cuerpo forman un todo también para el jolgorio.

La Virgen de la Portería despierta gran devoción entre los habitantes de Galleguillos y su entorno. Los vecinos pasearán hoy la imagen de la patrona sobre sus hombros: tras llevarla desde la ermita que lleva su nombre a la iglesia del Salvador, hoy se realiza el recorrido inverso y, en el día solemne, la Virgen volverá a ocupar su trono.

Las de la Portería son unas fiestas de marcado carácter gastronómico. En especial, cuando el cuerpo necesita reponer fuerzas de madrugada. Es el momento de recurrir a las sopas de ajo.

La quema de la tradicional hoguera también da la oportunidad de aprovechar las brasas para asar panceta en la parrilla y continuar disfrutando.

La traca final. Los actos se suceden y una chocolatada popular da el punto dulce al agrio pensamiento de que las fiestas de la patrona están a punto de concluir. El chocolate dará paso mañana lunes a la última verbena y a la traca de fin de fiestas.

Un programa con actividades para todos los gustos llena Galleguillos de Campos este fin de semana, festivo como ningún otro, en unos días en los que se nota caer el bullicio veraniego de los pueblos de la comarca: terminan las vacaciones y quienes han regresado a sus orígenes por el verano vuelven a su lugar de trabajo. Pero en un año los niños volverán a correr por unas calles que, de no ser por las fiestas patronales, estarían prácticamente vacías.