Conocer el vino para disfrutarlo

Ribera del Ornia, incluida en la denominación de Origen Tierra de León. Impulsada por las familias Alonso-Pradera y López-Martínez, se propuso recuperar la tradición vitivinícola de las tierras bañezanas cuando en el año 2006 presentó sus primeros vinos.

Fruto de este interés es el centro de interpretación que, desde hace meses, funciona en sus instalaciones, en una zona de La Bañeza en la que el viñedo abundó y se recupera ahora. El centro de interpretación es el primer paso de un proyecto más ambicioso, que verá la luz pasado el próximo verano: un aula del vino en la que formar a jóvenes viticultores de las tierras bañezanas con el fin de animarles «a recuperar la uva autóctona, la prieto picudo, y seleccionar las plantas», explicó Bernabé Alonso, director comercial de Ribera del Ornia.

La desaparición del viñedo en la zona se debió a la multitud de variedades y a que no se vendió para elaborar vinos de calidad, señaló Alonso, que explicó que se tratará de ciclos formativos reconocidos por las administraciones. «Aquí, de una rastrojera, hemos conseguido un viñedo que da una uva con los mejores valores de la denominación de origen», señala como ejemplo de lo que se puede conseguir con el debido cuidado del campo y del trabajo en la bodega, en la que uno de los máximos exponentes es Vendimiario, un vino con nombre de novela bañezana que mereció 90 puntos del experto Robert Parker.

El truco de Ribera del Ornia se explica en los paneles de su centro de interpretación, en el que se exponen desde los valores de la comarca hasta la composición del suelo, finalizando con la cata.

La selección de la plata en función del vino que se quiere conseguir, el marco de plantación, el laboreo en el viñedo, en el que la poda, la eliminación de malas hierbas y, sobre todo, la prevención de enfermedades se revelan como principales trabajos, dan paso a una vendimia que en esta bodega se realiza a mano.

Una prensa lenta, que no añada al vino todo el contenido del hollejo, conocer que en el mosto se produce una fermentación alcohólica y otra maloláctica, los trasiegos para limpiar los depósitos y-”en vinos viejos-”, las cubas y un embotellado por gravedad son otros pasos que explican en el centro. Por último se explica la forma de realizar una cata.

El centro de interpretación tiene capacidad para unas 25 personas. Las visitas se conciertan con la bodega directamente o a través de la Oficina de Turismo de La Bañeza. Algunos hoteles recomiendan a sus clientes esta visita.

Más información: www.riberadelornia.es