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Las plantas de hidrógeno y de e-metanol de La Robla reciben el visto bueno ambiental

Ambos proyectos tramitan la DIA de forma simultánea para producir cada año 28.800 tn de H2 y 100.000 de metanol
Editorial: 'La Robla se lo merece, como otros lugares'

Simulación virtual de las instalaciones de La Robla Green en el polígono industrial El Crispín  de La Robla.dl

Publicado por
M. Rabanillo
León

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Las plantas de hidrógeno verde y de producción de e-metanol de Reolum, que tienen previsto ubicarse en el polígono de El Crispín, en La Robla, ya cuentan con el visto bueno ambiental por parte de la Junta de Castilla y León.

Ambos proyectos, promovidos por Desarrollo Renovable Mahogany, S.L y La Robla Nueva Energía, S.L, respectivamente, han recibido la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) favorable, según se recoge en la edición del Bocyl de este miércoles, para producir, en el primer caso, 200 MW de electrolisis y 28.800 toneladas al año de H2 verde. Por su parte, la planta de e-metanol tiene previsto producir 100.000 toneladas al año. La DIA se ha tramitado de forma simultánea para ambas plantas, aunque no ha sido así con la tercera instalación que se ubicará en el complejo industrial, la planta de biomasa de Reolum, que abastecerá de energía a las dos anteriores.

En ambas plantas, los informes técnicos reconocen la colindancia del proyecto con la Red Natura 2000, pero estiman que «no se prevé la existencia de afecciones indirectas, ya sea individualmente o en combinación con otros proyectos, que pudieran causar perjuicio a la integridad» de la Red Natura.

Como condiciones, plantean la construcción previa de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (Edar) antes de la puesta en marcha tanto de la planta de hidrógeno verde como de la planta de producción de e-metanol, «puesto que es el único elemento que garantizará la ausencia de afección a la calidad de las aguas del río Bernesga y a los valores red natura por los que fue declarado ZEC, no solo en el lugar en el que se ubicará las instalaciones sino aguas abajo del vertido».

Alegaciones por la tramitación de urgencia y la falta de informes

Entre las alegaciones presentadas a ambos proyectos destacan las de Ecologistas en Acción, la Asociación Plataforma por el Futuro de la Montaña Central Leonesa y la Asociación Tierra Nuestra.
Entre las alegaciones presentadas se critica la declaración de urgencia de los proyectos, que reduce a la mitad los plazos, así como la falta de informes de Red Eléctrica Española, «por el consumo enorme de energía eléctrica de más de 2.000.000 de MWh/año» y que, según Ecologistas, equivale a la producción de seis plantas de biomasa como la que se va a instalar en el polígono.
También se refieren a la ausencia de informes de ADIF y de la Dirección General de Evaluación y Planificación Ferroviaria «por la afección al dominio público ferroviario que se utilizará para transportar la producción de 100.000 t/año de metanol» y de la Agencia de Protección Civil y Emergencias, «porque las fábricas de Hidrógeno y Metanol almacenarán grandes cantidades de estas sustancias peligrosas (sujetas a la Directiva Seveso), con riesgo para las personas, sus bienes y el medio ambiente».
También señalan que no se han proyectado y no se ha estudiado el impacto conjunto de las nuevas infraestructuras, «líneas eléctricas, línea de evacuación de energía eléctrica que previsiblemente produzca la central de biomasa, la EDAR que dé servicio al conjunto, plantas industriales complementarias, etc., que en general produzcan todas estas actuaciones con la fábrica de metanol».
Todas ellas piden que se les tenga por interesados en el procedimiento.

También requiere realizar una prospección previa en los pastizales-herbazales de vega de río ya que son susceptibles de albergar taxones de flora catalogada. Por otra parte, señalan que el proyecto tiene una «indudable repercusión paisajística» pero añaden que «el hecho de que se ubique en parcelas muy cercanas a otras infraestructuras industriales, como la central térmica, o numerosas líneas eléctricas aéreas, hace que el impacto sobre el paisaje será menor al tratarse de una zona ya muy transformada». «A pesar de ello se deberán realizar algunas mejoras para minorarlo al máximo», concluyen.

Una de las cuestiones más llamativas de ambos proyectos son las captaciones de agua del río Bernesga que se prevén para llevar a cabo las producciones. En concreto, según se recoge en la DIA, la planta de hidrógeno verde tiene previsto captar 1.694 millones de litros de agua al año. En el caso de la planta de metanol, la captación es de otros 455 millones de litros.

Estas captaciones de agua bruta del Bernesga son objeto de otro expediente por lo que no se analiza su impacto en esta declaración. El agua abastecerá el depósito de agua bruta de la planta, previo a su tratamiento en la planta de tratamiento de aguas para su desmineralización.

El proyecto cuenta con informes favorables de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD); del Servicio Territorial de Medio Ambiente de León. Área de Medio Natural; de la Agencia de Protección Civil y Emergencias de la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio y de la Dirección General de Patrimonio Natural y Política Forestal

Fernando Muñoz, presidente de Reolum, ha mostrado en un comunicado su satisfacción ante las DIA positivas asegurando que «este avance reafirma el compromiso de La Robla Green con la sostenibilidad y la innovación». Y agrega que «queremos agradecer a la Junta de Castilla y León por su apoyo y colaboración en este proceso». También señala que el proyecto, situado en el epicentro de la zona de Transición Justa de La Robla, integra a toda la provincia de León: "por un lado, la Montaña Central donde se ubica la actividad industrial y, por otro lado, la Meseta y Páramos Leoneses donde se produce la materia prima consistente en paja y restos de cosecha sin uso ganadero".

"Con estos permisos y los de conexión a red que se están consolidando tras haber presentado las garantías previstas para los nudos de Transición Justa, tanto para generación como para consumo de energía (electrolisis principalmente), todo indica que la construcción de las plantas, que conforman un proyecto cuyo presupuesto alcanza los 750 millones de euros, podría empezar antes de final de año, iniciando también las campañas de recolección de materia prima", añade la nota.