La Piedad, que sostiene el gesto doliente en el Desenclavo
Al pie del Santo Cristo del Desenclavo, de la Piedad y de Nuestra Madre María Santísima del Desconsuelo la cofradía de Santa Marina la Real, insignia pasional de este céntrico barrio leonés, cumplió con el precepto que cada Sábado Santo pone en escena el duelo por la muerte del hijo de Dios. Por las céntricas calles de León, el Desenclavo representa lo más íntimo de esta pasión que trasciende la barrera de lo humano y lo divino con ese gesto doliente de la Piedad que recoge a su hijo muerto al desprenderlo de la cruz; el camino a la vida, a la liberación de la muerte.