Dichosos los limpios de corazón
En lo que la Santa Cofradía de la Mirada al Cielo gana adeptos para la causa, no sólo por cuestiones de fe, como en las corridas de toros «con permiso de la autoridad y si el tiempo no lo impide» a los niños les llega hoy su día grande.
La Semana Santa sería maravillosa vista desde los ojos inocentes de los pequeños. La Borriquita y los globos se hacen todo uno en la plaza de Botines para la bendición de las palmas. Es a mediodía. Sonríe el obispo cada vez que acude a este acto. Limpios de corazón los quiere su Excelencia Reverendísima. Y en todos los órdenes de la vida...
Abre hoy la mañana un acto tan precioso como desconocido para buena parte del gran vulgo capitalino. San Francisco de la Vega saca a la calle su alma ferroviaria (las grandes galas las guarda para Martes Santo) y escenifica la bendición de los ramos que abre paso luego a una procesión chiquita pero de sabor leonés. La vuelta al barrio es una delicia. Quien quiera disfrutar de otros aires de la Semana Santa, bien hará en acercarse al Crucero esta mañana.
Familias, palmas y obleas se unen en el tiempo (y a veces en el espacio, con fatales consecuencias) para escuchar (es un decir, a tenor de las condiciones de los equipos de sonido de los últimos años) la palabra del Señor. «Dejad que los niños se acerquen a mí, porque de ellos es el Reino de los Cielos». Hasta el Domingo de Resurrección, será la última vez que los papones pujen un paso a cara descubierta.
Cinco grupos escultóricos se abren paso esta tarde en el patio de las Trinitarias. El Gran Poder tiñe de plata el cielo ya gris de por sí, para atenuar aún más la iluminación de la siguiente procesión, la que antaño se hizo llamar Santo Rosario de la Buena Muerte y a la que el dialecto leonés tradujo pronto: «Dainos Señor buena muerte, por tu santísima muerte».
En otro de esos ritos que quedan para gourmets de La Pasión, el ‘Nazareno Ranero’ se encontrará a última hora de la noche con la Virgen de las Lágrimas en la puerta de Santa Nonia, antes de encerrarse. Un primor.
A los hermanos del Santo Cristo de la Redención, de Nuestro Señor Jesús de la Misericordia, y de La Divina Gracia les llama hoy con tres aldabonazos el secretario de la cofradía de catafalco y grana, que dijo el pregonero. No estará la muchedumbre agolpada en la plaza del Grano para escuchar Jesús del Prendimiento al inicio del cortejo y estremecerse a la salida de la Virgen a los sones de Costalero mediada la subida de Las Carbajalas. Las obras del entorno del Mercado dejan para el año próximo un escenario más acorde al momento. La vuelta a la plaza Mayor y el regreso San Martín abajo entremezclan los últimos estertores del cortejo y anticipan la llegada del primer lunes que toma el apellido de la Semana.
Las procesiones del día: