SEMANA SANTA EN LEÓN
El Desenclavo conjuga lo breve y lo bueno
La procesión de las Tinieblas honra al Santísimo Cristo de las Injurias con un recorrido de ida y vuelta por el barrio de Santa Marina
Un cuarto de hora se demoró la salida del Santísimo Cristo de las Injurias, que escoltado por miembros del Cuerpo de Bomberos de León, compareció en l acalle cuando de fondo aún resonaban los ecos del acto que se acababa de poner en marcha en la Catedral.
Lo hizo en compañía de María Santísima del Mayor Dolor, que también despertó devoción entre buena parte de la concurrencia que llenaba las primeras calles de los aledaños de la zona de Santa Marina.
Instantes antes se había celebrado el Oficio de Tinieblas, que recrea el momento en el que se produjo la gran estampida de la tierra tras la muerte del Creador. El Desenclavo escenifica muy propio, con carracas y matracas y dejando el templo a oscuras, con el solo juego de las luces de los candelabros y las velas.