El Encuentro de la Virgen y el Santísimo cierra la Pasión en Ponferrada
La Pascua retiró el luto a la Encina
El cielo y las nubes fueron respetuosas y permitieron ayer en Ponferrada la celebración de la procesión del Encuentro de Resurrección, cerrando así los actos religiosos de l
La comitiva, cargada de solemnidad, salió de la plaza de La Encina y enfiló sus pasos por la calle Comendador, plaza del Temple, avenida del Castillo, Gil y Carrasco para confluir de nuevo en la remodelada plaza granítica de La Encina. A la misma hora, y con otro recorrido circular por el casco antiguo, los nazarenos vestidos con túnica blanca sin pucho, discurrieron con el Santísimo Sacramento bajo palio por la calle Tras la Encina, Aceiterías, Carnicerías, calle del Reloj, para encontrarse en un emotivo acto en la plaza de la Encina con la patrona. El luto de La Morenica fue finalmente quitado, escenificado con la retirada del velo negro que cubría su figura, este año por vez primera en la remodelada plaza lo que facilitó que todo el público pudiese presenciar el acto. La alegría fue igualmente plasmada con un estruendoso sonido de cohetes, entre el volteo de campanas desde la Basílica de La Encina, que venía a anunciar el gozo de la Resurrección de Jesucristo. Toda la comitiva, con los nazarenos, las mujeres con mantilla y las imágenes sacras, entraron en el interior del primer templo de Ponferrada y fueron finalmente partícipes de una misa de pascua concelebrada de Acción de Gracias a la que acudió también la corporación municipal. Fernando Frá, mayordomo de la Hermandad de Jesús Nazareno, -la más antigua de Ponferrada-, destacó que este año fue el que mayor número de personas acudieron a las procesiones y otros actos de culto. Fernando Frá quiso hacer público el agradecimiento a los jóvenes de la junta de gobierno de su cofradía por su trabajo durante estos últimos quince días, ya que, según dijo, «sin ellos, sin su gran esfuerzo y sus ganas de trabajar, esto no podría salir adelante». El mismo mayordomo agradeció igualmente la presencia de las autoridades y la multitud de asistentes, puesto que todos los actos se desarrollaron «con mucho orden y solemnidad», y con una afluencia de público que de nuevo desbordó todas las previsiones. El único dato negativo de esta Semana Santa fue la suspensión de la procesión de La Soledad, por la lluvia, que amenazó el viernes aunque no impidió los desfiles. Las actividades concluirán el próximo domingo, con la misa de acción de gracias de la Hermandad de Jesús Nazareno en la Basílica de la Encina.