El territorio que poblaron los monjes visigóticos y el oro

Paisajes para el recogimiento y el descanso. Nada puede resultar más evocador, en este sentido, que el valle del Silencio, una tierra adecuada para la calma y la reflexión. Así lo descubrieron los monjes visigóticos, que poblaron cada pliegue de este laberinto de valles con sus eremitorios y cenobios. Ejemplos de monasterios a visitar: Compludo, San Pedro de Monets o Peñalba de Santiago. También es propicio para el relajo Las Médulas, yacimiento romano declarado Patrimonio de la Humanidad, en cuyo entorno se respira paz y tranquilidad. www.asturplaza.com/vallesilencio y www.fundacionlasmedulas.com PARA COMER Mesón El Lago (Carucedo) y Casa del Ermitaño (Compludo). PARA DORMIR Alojamientos rurales.