Cortejo de las Bienaventuranzas
Es el evento más madrugador para iniciar el ajetreado día del Jueves Santo con salida en la plaza de San Isidoro a partir de las 9.30 de la mañana. Uno de los momentos más álgidos del cortejo tiene lugar delante de la Catedral donde se realiza el pregón de las Bienaventuranzas. Como anécdota los hermanos braceros en algunos momentos del recorrido levantan el paso con los brazos extendidos a la voz de al cielo, convirtiéndose en una nota diferenciadora de la orden. La novedad más destacada de la cofradía para la presente edición pasional reside en la realización de un nuevo paso que responde al modelo iconográfico de un Nazareno realizado por el escultor leonés Jose Luis Casanova. Representa el momento en que Cristo se precipita al suelo en una de sus caídas durante su periplo hacia el Calvario. Ha sido realizada en madera de pino libanés, con base de estuco y policromía tradicional, con una altura cercana a los dos metros. Es una imagen de pabellón puesto que el cuerpo aparece cubierto con indumentaria compuesta por una túnica morada. Sirve para sustituir al anterior Nazareno, obra de serie realizado en Olot - Gerona, cedido por la iglesia de San Pedro de Boñar. Este mismo autor ha dejado su huella escultórica en otros dos pasos de la cofradía, la Virgen de la Pasión y el Cristo de la Bienaventuranza, copia del Crucificado de San Claudio.