Diario de León

Los Pasos, cénit de la Pasión Cortejo de las Siete Palabras Procesión del Santo Entierro

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Tiene su origen en 1611 y es organizada por la cofradía del Dulce Nombre de Jesús Nazareno. Existen pruebas documentales que podrían retrasar la fecha del génesis a mediados del XVI a través de una orden de corte penitencial compuesta por hermanos nazarenos que serían portadores de emblemas crucíferos. Esta primitiva congregación de Jesús tenía su eje de actuación durante el Miércoles Santo y no el Viernes como sucede en la actualidad. Se suscita una interrogante con la aparición del paso de la Flagelación, supuestamente obra del escultor Gaspar Becerra, autor del retablo de la catedral de Astorga, puesto que su iconografía estaría más cercana a diferentes agrupaciones de Flagelantes, inicio indiscutible de todos los cortejos procesionales, que de asociaciones penitenciales. Una de las efemérides más destacadas en la presente edición es la celebración de los cuatrocientos años de la creación del Monasterio de la Santa Cruz de Franciscanas, conocidas popularmente como las Clarisas. La vinculación de la monjas con la cofradía ha sido siempre muy estrecha puesto que han confeccionado numerosos elementos para la orden y han custodiado otros tantos. Para conmemorar el evento cuando el paso de Nuestro Padre Jesús Nazareno se aproxime al recinto sagrado las hermanas entonaran un cántico en señal de respeto. Del mismo modo se sustituirá el típico cordón dorado que habitualmente lleva el Nazareno al cuello por el «cordón del milagro». En el aspecto patrimonial la cofradía ha mandado restaurar las imágenes de San Juan, Víctor de los Ríos 1946 y la Dolorosa, del mismo autor realizada en 1949. La reposición de las obras ha sido realizada por la conservadora Francisca Romero Abajo, quien ya se ha encargado de anteriores trabajos para la orden de Santa Nonia. Numerosas grietas, aperturas de ensamblajes, diversos golpes y deterioro en la policromía fueron algunos de los problemas que las tallas soportaron durante los últimos años. En el mismo campo artístico ha sido recuperada la antigua imagen de la Coronación, realizada en 1908 y sustituida en 1977 por una magnífica talla de Higinio Vázquez. La bendición del templo de Santa Nonia se realizó en el año 1805 por el sacerdote de San Pedro de los Huertos, Luis Aguado, cumpliéndose por tanto en el presente período doscientos años. Por último reseñar los diez años de existencia de la Banda Infantil de Cornetas y Tambores, puesto que se presentaron de forma oficial el 26 de mayo de 1995 en el Recreo Industrial, interpretando dos marchas, la Virgen de la Paloma y la Dolorosa, siendo sus directores iniciales Luis Vergara y Manuel Herbalejo. Sin duda la procesión de los Pasos es el mejor desfile pasional de toda la Semana Santa leonesa. Desde que el paso del Nazareno realiza su aparición a través del atrio de la iglesia de Santa Nonia con las primeras luces del día todo se convierte en magia durante el resto de la jornada. La subida por la cuesta de Castañón en las proximidades del convento de las Carbajalas servirá para medir las fuerzas de los braceros de Jesús y aproximarse a la plaza Mayor donde tendrá lugar el Encuentro. Todos los pasos se ubican alrededor de la explanada con la excepción del Nazareno que se dispondrá en el centro de la misma. Delante de la antigua casa consistorial la imagen de San Juan se arrodilla en señal de respeto y veneración ante la Virgen Dolorosa. Es el cenit de toda la Semana Santa leonesa, con los abrazos que se prodigan los braceros de ambos pasos así como los de sus seises representan las verdaderas raíces de la pasión leonesa. Las referencias más pretéritas del acto se remontan a la década de los años veinte durante el siglo XIX. Durante muchos años la cofradía de Jesús tuvo que pedir prestado el paso de la Virgen para la escenificación al no disponer ésta de ninguna referencia mariana. El acto del Encuentro fue acompañado durante varias décadas de un Sermón, incluso de manera anterior se manifestaba la correspondiente plática penitencial, se decidió suspender en 1976- tanto el Encuentro como el Sermón- recuperándose la escenificación teatral del amado Juan con la Virgen en 1989 y la homilía benefactora en el 2003. A continuación el cortejo continua su periplo pasional hasta producirse el descanso para retomar fuerzas en la plaza de Santo Martino. El resto del recorrido se produce por las calles del León comercial hasta llegar el cortejo, bien pasadas las tres de la tarde, a la iglesia de Santa Nonia donde los braceros realizan el último esfuerzo bailando los pasos delante de su ermita sagrada. Los trece grupos de Jesús constituyen el mejor ejemplo patrimonial de las cofradías leonesas. Víctor de los Ríos con tres obras es un buen exponente de la escultura española entre 1945-1975. Autores clásicos como Becerra, Tudanca o Pedro de la Cuadra dejaron su huella en la orden. Escultores contemporáneos como Laureano Villanueva, Higinio Vázquez o Angel Estrada marcaron una nueva era en la cofradía. El Ecce Homo, de autoría anónima, cumple cien años. La mayoría de los tronos han sido diseñados y realizados por uno de los mejores escultores actuales Melchor Gutiérrez San Martín, destacando el de la Verónica , con medallones de Apóstoles, o los Evangelistas de la Crucifixión. La última incorporación corresponde a la Exaltación del sevillano Navarro Arteaga con una espectacular puesta en escena. Organizada por la cofradía de las Siete Palabras de Jesús en la Cruz erigida canónicamente por el Obispo Almarcha el 22 de septiembre de 1962. El máximo impulsor de la hermandad fue Eduardo de Paz Díez. Su sede eclesiástica reside en la iglesia de San Marcelo donde se expone al culto el Cristo Crucificado de los Balderas obra de Gregorio Fernández realizada en 1631. Durante unos años fue procesionado por la orden en alternancia con el Dulce Nombre. Debido al deterioro que podía sufrir la obra se decidió hacer una copia a cargo del escultor Amado Fernández en 1966. Una hora antes de la salida del cortejo tendrá lugar el Sermón de las Siete Palabras como preámbulo de la procesión. Existe la llamada Cruz de Difuntos que es solicitada por algún miembro de la cofradía que ha sufrido una pérdida personal y poder portarla durante el recorrido del Viernes Santo. La cofradía presenta la particularidad de tener un grupo de hermanos que montan a caballo con guión propio realizado por Melchor Gutiérrez que sirven para abrir el cortejo y realizar el Pregón durante el Jueves Santo anunciando la salida del desfile por las calles de León. Del mismo modo participan representantes de cofradías homónimas de otros puntos de la geografía española. La Guardia Civil, que desfila con uniforme de gala son considerados por la cofradía como hermanos honorarios. La orden creó una banda de cornetas y tambores en 1969 regalándoles una la túnica como reconocimiento a sus esfuerzos. El estamento musical se disolvió en 1975. Se volvió a recuperar la música para la cofradía el 21 de abril de 1989 formándose la actual banda de música. El patrimonio de la cofradía está configurado por el referido Cristo de los Balderas y la copia de Fernández (Séptima Palabra). El paso de la Segunda Palabra lo realizó Angel Estrada en 1964, representando iconográficamente a Jesús entre los ladrones, siendo el conjunto escultórico de mayor valor de todo su elenco patrimonial. En 1994 el escultor zamorano Hipólito Pérez Calvo realizó la Tercera Palabra en la que se representa el momento en que Jesús se dirige a la Virgen y a su discípulo Juan. Realizadas en madera de abedul sin policromar siguiendo una línea similar a la del Cristo de la Agonía de Laureano Villanueva de 1973. La influencia sevillana se ha dejado notar en la cofradía con la incorporación de dos nuevos pasos. La Cuarta Palabra de Jesús Iglesias 1996 - 2000 en la que aparece Jesús, la Magdalena y dos romanos jugándose la pertenencias del Redentor. La última adquisición fue ejecutada por el también andaluz Manuel Martín Nieto representando la Quinta Palabra, «Tengo Sed». Cortejo procesional organizado por la Real Cofradía de Minerva y Vera Cruz con salida del convento de los PP Capuchinos. En años anteriores lo habían realizado desde las Carbajalas, Obispado, Palat del Rey e iglesia de San Martín. En origen eran dos entidades penitenciales diferentes, unidas desde 1876 como se ha venido defendiendo tradicionalmente o bien en 1895 según las últimas aportaciones. Es posible que la más pretérita de las dos sea la de la Vera Cruz con una fecha fundacional cercana a comienzos del siglo XVI teniendo una procesión de disciplinantes el Jueves Santo. Su sede se encontraba extra muros en el convento de San Francisco el Real hasta que en 1837 tuvieron que abandonarlo para dirigirse al templo de San Martín, sede actual de la orden. En éste mismo recinto teológico residía la Vera Cruz fusionándose posteriormente como ya hemos relatado con Minerva. Anteriormente también había residido en el convento franciscano y más concretamente en la capilla de la Cruz donada por el matrimonio Álvarez Rivera y Quiñones Obregón. A raíz de la Desamortización en 1836 la cofradía de la Vera Cruz se traslado al recinto de San Martín. La procesión del Santo Entierro presenta la singularidad de que la corporación municipal participe en la puja del paso de la Soledad haciéndolo coincidir con la presencia de San Isidoro durante su trayecto. Anteriormente se realizaba a la salida y entrada del cortejo en la sede correspondiente. Después de la Guerra de la Independencia (1812) se decide retomar los desfiles procesionales, interrumpidos por los sucesos bélicos. Es en éste momento cuando por primera vez el patrimonio de ambas entidades se fusionan para realizar la procesión del Santo Entierro, el Santo Sepulcro de la Vera Cruz y la Soledad de Angustias. En 1830 se firma la famosa Concordia para hacerse cargo ambas cofradías del desfile del Entierro. Cediendo la Vera Cruz parte de sus derechos sobre la procesión y Angustias renunciando a la procesión de la Soledad, cumpliéndose en el presente año el 175 aniversario del concordato. Para conmemorarlo la Junta de Seises de la cofradía de Angustias acudirá en bloque a la procesión junto al guión, pendoneta y bandera. En el evento participaran cinco bandas de música, Sepulcro, Bienaventuranza, Jesús, Angustias y Minerva. Los pasos que intervienen en la procesión son nueve, Lignum Crucis con un fragmento de la Santa Cruz, un Crucificado de Amado Fernández, un Cristo renacentista de forma articular, Descendimiento de los Ríos, la Piedad de Carmona, la Amargura que presenta el trono restaurado y aligerado de peso, Yacente, San Juan y la Soledad.

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