La Bañeza mece una pena

La Bañeza se volcó con una de las imágenes de la Virgen que más devoción despiertan en la ciudad: Nuestra Señora de las Angustias y Soledad salió a la calle tras la última de las misas de la novena que se ha celebrado en su honor y que ayer se adornó de manera especial con las voces de la Coral del Milenario. La Virgen, acompañada por un nutrido gruido de bañezanos durante todo el trayecto, lució capa de plástico, por las intermitentes gotas de agua que cayeron ayer por la noche en la ciudad. Con el corazón atravesado desde el siglo XVII y el cuerpo de Cristo muerto en sus brazos, esta piedad partió de la Parroquia de El Salvador, donde se entregó un ramo de flores, tal y como marca la tradición, a la devota que pagará la novena del año que viene. Tras las necesarias maniobras para sacar el paso del templo románico, se formó la comitiva, en la que destacaban las mujeres de la Cofradía Penitencial de Águedas. También formaban parte del desfile, los representantes de las cofradías de Nuestro Padre Jesús Nazareno y de la Vera Cruz, así como el alcalde y miembros de la corporación municipal, tanto del equipo de gobierno como de la oposición. La del Viernes de Dolores, es la primera de las 17 procesiones que se celebran en la ciudad y siempre cuenta con el favor de un numeroso público, que bien había asistido a la misa o que se congregó luego en las calles que recorrió la de los siete cuchillos, portada en andas por cuarenta braceros de negro y morado. Las marchas corrieron a cargo de la Banda de Cornetas y Tambores de Nuestra Señora de las Angustias y Soledad, con música para que los braceros mecieran, acariciasen con su vaivén a una madre rota de dolor por la muerte de su hijo, injustamente castigado. Finalizado el recorrido por las calles de El Salvador, Vía de la Plata y Escultor Rivera, cofrades y público despidieron a la imagen con el tradicional canto de la Salve, que constituye, quizá, el momento más emotivo del recorrido. Posteriormente la imagen fue encerrada en la capilla cofrade, cuyos orígenes se remontan al siglo XVI. Procesión de hermandad A las siete y media de la tarde de hoy, las cofradías bañezanas y la leonesa de Jesús Divino Obrero celebran la procesión de hermandad: un desfile itinerante, se celebra en La Bañeza o León de forma alternativa, organizada por los de Nuestro Padre Jesús Nazareno y los leoneses. Como hace dos años, esta vez también se ha invitado a participar a las cofradías de las Angustias y Soledad y de la Vera Cruz. Divino Obrero procesiona con la Soledad, la Vera Cruz estrena paso, Angustias desfilará con la imagen que le da nombre y Jesús Nazareno mostrará el Crucificado.