La Morenica se despojó del luto La basílica abarrotada vibró al levantar el velo negro

Las gotas de lluvia caídas en Ponferrada en la mañana de ayer, celebración del Domingo de Resurrección, obligaron a realizar la tradicional ceremonia de despojar del luto a la Virgen de La Encina dentro de la basílica que lleva su nombre. Pero como dice el dicho, «no hay mal que por bien no venga», con lo que lo que en un principio se perfilaba como un inconveniente, terminó siendo, según la definió el mayordomo de la cofradía de Jesús Nazareno, organizadora de la procesión, Fernando Frá, «una ceremonia preciosa y tal vez la más acogedora y emotiva, puesto que la basílica estaba abarrotada», lo cual permitió que el calor y el fervor de los ponferradinos arropara a la Morenica en el momento de despojarse del terrible luto de la muerte de su hijo, al anunciarse su resurrección. El paso del Santísimo Sacramento y el de Nuestra Señora de La Encina con el luto recorrieron por diferentes pasillos el interior de la basílica. Las mujeres con mantillas negras acompañaron a la Virgen vestidas de riguroso luto. Como manda la tradición, la Morenica fue despojada del velo negro, para recibir la resurrección de su hijo. Este año, el encargado de realizar esta tarea fue Enrique Martínez, sacerdote ponferradino que en la actualidad se encuentra en Roma ampliando sus estudios. Se trata de una persona muy apropiada para realizar esta tarea, por su vínculo con la religión, ya que la tradición manda que de la retirada del luto se encargue un sacerdote, y por su condición de ponferradino del propio casco antiguo, vecino del barrio de San Andrés, como así destacó el propio Fernando Frá. Una vez despojada de su luto, la Virgen de La Encina fue acompañada por las mujeres vestidas de mantilla blanca, que celebra la Resurrección del Señor que pone fin a la Semana Santa. Las campanas sonaron en ese momento para anunciar la buena nueva y la banda municipal de Ponferrada, que tuvo que subir al coro de la basílica por no tener más sitio para colocarse, celebró el momento con la interpretación del himno nacional. Según señaló Frá, esta solución a la lluvia es la que «se ha hecho siempre», aunque desde los ochenta, dijo, no se había repetido. La basílica de La Encina acogió en la mañana de ayer una improvisada ceremonia en la que, como manda la tradición, un sacerdote despojó a la Morenica del velo de luto que vestía por la muerte de su hijo. La Virgen fue acompañada hasta este momento por mujeres vestidas con mantilla negra, y una vez que se despojó del velo negro, éstas fueron sustituidas por las mujeres con mantilla blanca. La ceremonia congregó a multitud de personas que abarrotaron la basílica para seguir la ceremonia.