HERMANDAD DE SANTA MARTA Y LA SAGRADA CENA
El rosario de la Pasión prende las emociones de cientos de leoneses
La plaza de Botines selló la primera parada. Ante la iglesia de San Marcelo, los hermanos de Santa Marta y la Sagrada Cena ofrecieron el primero de sus cinco Misterios Dolorosos del Santísimo Rosario. La misma liturgia en San Isidoro, Santa Marina, Catedral y la Capilla del Santo Cristo de la Victoria. Los actos de la procesión del Rosario de la Pasión desbordan recogimiento y fe. Vestidos con túnica de lana, color crema, terminada en unas bocamangas de terciopelo rojo y capirote alto de la misma tonalidad, más de mil hermanos acompañan los pasos. La Oración de Jesús, La Flagelación, Caída de Nuestro Señor, Crucifixión y Muerte y Piedad, afrontaron desde las nueve menos cuarto de la noche un callejero que ofrecía un cortejo con emociones amables para el que contempla. La Agrupación Musical de Santa Marta y la Sagrada Cena regalaba sensaciones a media docena de tallas del siglo XVII, que guardan silencio en diferentes iglesias de la provincia a lo largo de todo el año. La línea de hermanos y hermanas avanzó hasta el mismo punto donde se dibujó su comienzo. En la puerta del Templo de San Marcelo, que da acceso a la plaza de Botines, se rezó la letanía en honor a la Santísima Virgen. Al terminar, otra vez ese silencio. El mismo que aparecía al final de cada Misterio.