Jesús camina hacia el Calvario

Frente a la centenaria vida de otras agrupaciones, la cofradía La Agonía de Nuestro Señor, fundada en 1993, ha sabido hacerse un hueco en la Semana Santa leonesa. Su procesión, la de Jesús Camino del Calvario, cada año concita el interés de más gente y ayer, a pesar del frío y de la coincidencia con otras procesiones, volvió a repetir la misma escena. La puerta del colegio Leonés, junto a la iglesia parroquial de Santa Marina la Real, era ya punto de interés varios minutos antes de que las hermanas cofrades comenzaran a desfilar, con el silencio como compañero, por las calles capitalinas, algo que no sucedió hasta las ocho y cuarto de la tarde. Son sólo mujeres, en torno a 150, con una túnica morada y puntillas doradas en las bocamangas. El capillo y el cíngulo tienen la misma tonalidad, mientras que el resto del atuendo es negro. La marcha avanzó pausada, como si quisiera prolongarse eternamente, por Serranos, plaza Torres de Omaña, Cervantes... Así hasta la Regla, donde más gente esperaba para ver al único paso que muestran: Jesús del Via Crucis, tallado por José Ajenjo en 1998 y que representa a un Nazareno, portado por 70 braceras, con un madero apoyado en la espalda y con los brazos sujetándolo, porque antiguamente los reos sólo llevaban a cuestas la parte superior del madero.