A gritar, al campo de fútbol

león

Un portal de internet ha puesto en marcha una campaña para concienciar al público que asiste a las procesiones de Semana Santa de la necesidad de erradicar la costumbre de aplaudir por norma al paso de los conjuntos escultóricos, a la vez que exigir un respeto al paso del cortejo con un tono de voz acorde a la solemnidad de las procesiones. La iniciativa también pretende poner fin a la costumbre de los viandantes que cruzan de un lado a otro de la calle en pleno desarrollo de la marcha.

El portal de internet papones.es lamenta estas circunstancias: «Somos muchos los papones, que vemos, con asombro, que año tras año aumentan los aplausos de los espectadores en las procesiones. Muchos de nosotros no vemos compatible el aplauso, con la seriedad y solemnidad que queremos transmitir en la calle. Por esta razón, hemos puesto en marcha esta campaña».

«Los aplausos en las procesiones tienen menos de dos décadas de antigüedad y nuestra ilusión es que esté pronta la hora de su desaparición», dice la página web.

«Nuestra idea es envíar una «postal» por correo electrónico a nuestros contactos, y que estos lo reenvíen a los suyos. Por lo tanto, si estás de acuerdo con esta campaña y te llega un correo electrónico, por favor, reenvíalo. No te prometemos varios años de felicidad, simplemente unos pocos días al año de «Pasión en estado Puro».

En el transcurso de las Jornadas de Divulgación de la Semana Santa celebradas el mes pasado en la Colegiata de San Isidoro, bajo la organización del Club de Prensa de Diario de León, fueron varios los expertos que incidieron en esta misma cuestión.

Opiniones fundadas

«Entre las costumbres que habría que eliminar de nuestra Semana Santa está la de aplaudir cuando llegan los pasos, que afea notablemente nuestras procesiones», destacó el abogado, escritor y poeta Jorge Revenga. «La Semana Santa de Sevilla está hecha para el fervor, la pasión, también el jolgorio en algunos casos y la explosión popular. En León hablamos con el silencio», explicó en su disertación Susana Vergara, redactora jefe de Diario de León.

«La Semana Santa de Cartagena está hecha de colores y de sensaciones. La de León es la sobriedad y el recogimiento, el silencio y la interioridad», destacó Federico Trillo, ex presidente del Congreso de los Diputados y uno de los ponentes invitados.

Fray Carlos Amigo Vallejo, cardenal arzobispo de Sevilla, consideró sin embargo, que esta costumbre es una circunstancia más en la propia idiosincrasia de dos zonas tan diferentes: «Nadie entendería una Semana Santa en Sevilla sin jalear a La Macarena, igual que no se comprende la Semana Santa de León si no es desde el silencio. A cada uno, lo suyo».