La Esperanza se mece en Sol sostenido
Las excelencias de las bandas y el buen tiempo abarrotan la procesión de Jesús Sacramentado
león
Santo Martino se lleno de notas coloristas por un momento. Apareció la banda del Cristo de la Victoria y en el aire, la armonía cobró vida. Irrumpió la Agrupación Musical de Santa Marta y la Sagrada Cena, no menos elegante en el uniforme y si hubo siquiera una nota discordante debió esconderse bajo la inmensidad del manto azul de la Virgen de la Esperanza, que cerraba cortejo. La música y las excelencias de la climatología (22 grados a la hora del inicio de la procesión) hicieron el resto en una tarde de sábado plácida.
Por delante, había salido ya la imagen titular de María Santísima de la Piedad al Amparo de los Leoneses (hace falta respirar para enunciarla, igual que para enfilar el paso en dirección a San Isidoro por la calle Sacramento). Un Yacente imponente, una Piedad de verdad y una Esperanza de bonanza fueron abriéndose paso entre el gentío que comía obleas en la acera. El sol de la primavera y el Sol sostenido de la trompeta se daban la mano mientras.