Diario de León
Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

Cuando entorné los ojos al mirarte

he sentido, Señor, que me mirabas,

he escuchado, Señor, y Tú me hablabas,

y, escondido, he podido casi hablarte.

Porque el Viernes que yo quise matarte,

cuando supe que Tú me perdonabas

me he acercado -con promesas calladas-

hacia el cielo para desenclavarte.

Agua y fuego fueron tu compromiso

con la ciudad silente amurallada

cuando, Señor, nos diste el paraíso.

La Soledad se encuentra arrebatada

llorando por tu ausencia que no quiso

durar más que una noche albimorada.

tracking