Vidas modernas, muertes trágicas
El hijo de Brian Jones
Jesús Ferrero
XIII Premio de Novela Fernando Quiñones.
Alianza Editorial (Alianza literaria). Madrid, 2012.
314 páginas
Desde la publicación de Bélver Yin, la obra del zamorano Jesús Ferrero se ha caracterizado por un planteamiento novedoso, patente en El hijo de Brian Jones , fundador, con Mick Jagger y Keith Richards, de los Rolling Stones. Ambientada en Nueva York, la novela presenta una novedad: la presencia de Julián, hijo del jardinero de Brian Jones. Nacido en Londres, huérfano, criado por su abuela en Madrid, se trasladará a los Estados Unidos, donde conoce a Alexis, un joven misterioso, dedicado al mundo del teatro.
Alexis, hijo de Brian Jones, representa el espíritu estético y arrebatado de su padre. Frente a él, Julián es el símbolo de un mundo vulgar, sin que ello sea óbice para una buena relación personal, armonizada por la belleza de Gloria.
En este grupo de personajes tendrán gran importancia Lu, la madre de Alexis, y su abuela Verónica, postrada en una silla de ruedas, pero vigilante obsesiva de su nieto.
Aparte de otros amigos de andanzas teatrales, como Odón, o Martin, esas dos mujeres condicionan el desarrollo temático, de trágico final. Son los ecos de vidas al borde del abismo y al margen del convencionalismo burgués.
Pero la vida sigue. Muerto el delicado perrillo Tobi, de gran simbolismo en la obra, Julián y Gloria contemplan felices el Kilimanjaro en su arrobamiento amoroso. Pero vuelven al «Inexplicable esplendor jónico de Nueva York cuando declina la tarde».
Un Nueva York magníficamente evocado en sus espacios míticos en el que Odón, el responsable del teatro, escribe en el hotel Chelsea, El hijo de Brian Jones. Un buen buen final metaliterario para una excelente novela.