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En el terreno de los seres inofensivos

Palabras insensatas que tú comprenderás Salvador Compán Editorial Almuzara, 2012. 292 páginas.

Publicado por
nicolás miñambres
León

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Afirmar que «en el terreno de los seres inofensivos» es donde pretende situar Santiago Díaz-Rey a Luisa Lasarte nada dice de entrada, pero es una observación escalofriante para el lector. A medida que se adentra en estas páginas de Salvador Compán, comprueba la maestría con que novela una de las relaciones humanas más humillantes del pasado siglo XX, la del dramaturgo Gregorio Martínez Sierra, el autor de Canción de cuna, y su esposa María Lejárraga. Irrelevante en su condición física y creadora, Martínez Sierra tuvo en la excelsa y progresista María Lejárraga la compañera fiel, la fuente del sustento económico en alguna época de su vida y, especialmente, la autora de todas sus obras, incluidas las conferencias que profusamente impartió. A todo ello se une otra humillación: la esposa tuvo que soportar los sonados amores del escritor con Catalina Bárcena, primera actriz de su compañía de teatro.

Esta situación de dolor sentimental es el que Salvador Compán revive en la novela, con Santiago Díaz-Rey y Luisa Lasarte como protagonistas. Los poemas de Díaz-Rey, poeta bastante afamado, son en su mayor parte textos robados del diario de Luisa Lasarte. Partiendo de esta situación de hondo desgarro sentimental y con abundantes documentos alusivos a María Lejárraga, Salvador Compán va tejiendo una novela apasionante por la forma en que desarrolla este drama humano de los tiempos actuales. Hay que advertir que el tratamiento personal de este drama sentimental presenta sensibles diferencias. Aunque Luisa Lasarte sufra en principio el mismo dolor íntimo, su actitud es la de una mujer que trata de rehacer su vida a través del trabajo intelectual, del amor y de la literatura, de gran valor gran valor como terapia personal y de excelentes resultados como procedimiento metaliterario.

Las relaciones humanas de Luisa Lasarte son esencialmente masculinas. El dolor que le provoca la actitud del inepto Santiago, su marido, queda aliviado por su amistad con tres hombres esenciales en su vida, necesitados de afecto también. El primero de ellos, Scott Cover mantendrá con ella unas relaciones esencialmente literarias, mientras Andrés Salgado une a su condición cultural una actitud más sentimental. Completando estas actitudes humanas, Pedro Castilla ofrece otra mirada afectiva. Los tres complementan el perspectivismo literario del que se va alimentándose la novela para llegar a un desenlace sorprendente. Un digno final para unas páginas del autor de Cuaderno de viaje , tal vez la mejor novela de Salvador Compán.

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