Literatura fantástica: una fiebre sin fin
l. ‘La corte del hechicero’ sitúa a Calligaris en el Olimpo del ‘fantasy’. la literatura fantástica y de ciencia-ficción continúa su ascenso imparable en América Latina, dónde sigue ganando adeptos
Imagen de la escritora Tiffany Calligaris posando junto a algunos de sus libros en Buenos Aires
L a corte del hechicero , última entrega de su conocida saga, sitúa a Tiffany Calligaris, con solo 25 años, como una de las ‘reinas’ de un fenómeno literario que cosecha miles de seguidores en Argentina, tal y como reconoce en una entrevista en la que recuerda sus temores al comenzar a escribir Memorias de un engaño , su ópera prima y el primer tomo de la saga que comenzó a redactar con 21 años. Entonces le pareció «una locura» comenzar una trilogía, pero hoy reconoce que está satisfecha del trabajo realizado, con el que se ha convertido en un fenómeno de ventas en el cono sur.
En Lesath , la joven autora relata las aventuras de Adhara, una joven mitad elfo y mitad humana que al cumplir 19 años abandona el reino élfico, donde nunca se ha sentido cómoda, para dirigirse al mundo de los humanos, Lesath, en el que se descubrirá a sí misma después de enamorarse, de conocer a nuevas personas y en el que se enfrentará a fuerzas malignas ocultas. Entre sus referentes la argentina cita a J.K. Rowling, Christopher Paolini y J.R.R.Tolkien, cuya obra la inspiró para crear el mundo mágico de Lesath, un género con el que —asegura— se ofrece una vía de escape «que otros géneros no te dan porque se asocian más a las cosas que pasan todos los días».
En Argentina el ‘fantasy’ no ha hecho más que crecer en los últimos años, especialmente entre el público adolescente, lo que ha motivado a las editoriales a publicar a jóvenes autores que primero devoraron libros del género para luego crear sus propias historias.
Entre los representantes de este fenómeno literario se encuentran Victoria Bayena, Nicolás Pinto, Julián Cáceres o María Inés Linares, junto a los cuales Tiffany Calligaris ha creado la ‘cofradía del fantasy argentino’, un foro en el que los autores de ciencia ficción se reúnen con adeptos del género para intercambiar opiniones. Pero no solo en Argentina triunfa este género, que se ha afianzado en las últimas décadas en otros países como Perú, Colombia, Puerto Rico o Cuba.
Así, el peruano Luis Alonso Cruz; el puertorriqueño Rafael Acevedo; el cubano José Miguel Sánchez, Yoss , autor de Leyendas de los Cinco Reinos ; o el colombiano Antonio Mora, considerado uno de los padres de la ciencia ficción en su país, son buenos ejemplos de la efervescencia del ‘fantasy’ en América Latina. No obstante, para todos estos autores, presentes recientemente en la Feria Internacional del Libro de La Habana, la publicación y circulación editorial de la ciencia ficción continúa siendo insuficiente en sus países, a pesar de la creciente demanda que existe por parte del público joven.
En el ránking de las mejores sagas de literatura fantástica de los últimos años se encuentran El señor de los anillos, de John R.R. Tolkien; Canción de hielo y fuego , de George R.R. Martin; Las crónicas de Narnia, de C.S.Lewis; Crónicas de Belgarath , de David Eddings; o La materia oscura , de Phillip Pullman, con miles de ejemplares vendidos.
Entre los autores españoles de literatura fantástica Laura Gallego se ha hecho un hueco propio, con títulos como Crónicas de la Torre, superventas, Memorias de Idhún, con un amplio colectivo de fanáticos ‘idhunitas’ o el más reciente, El libro de los portales. Entre las novedades editoriales del género se encuentran títulos como La primavera de los rebeldes , segundo volumen de la saga La caída de los reinos , de Morgan Rhodes, en el que, tras la caída de los reinos, unos tratan de gobernar las ruinas mientras otros se rebelan y toda ‘Mytica’ se sacude en una guerra.
La joven ahogada , de Caithlín R. Kiernan, es otro de los títulos recientemente publicados, adscrito al género fantástico de terror, mientras que ya se ha anunciado la futura publicación de una nueva trilogía de Tad Williams, El último rey de Ostend Ard , con la que el autor dará continuidad al célebre mundo de Añoranzas y pesares . No obstante, los autores de literatura fantástica coinciden en el diagnóstico de la situación: el auge del género entre el público no se está viendo compensado por la difusión editorial del mismo, por lo que confían en que la balanza se equilibre y el «fantasy» cuente, en un futuro próximo, con el reconocimiento que se merece.