Asignaturas que hablen de amor

V estido con una sudadera azul, el escritor, actor, director y guionista de cine Albert Espinosa está en plena promoción de su nueva novela El mundo azul ama tu caos , un libro que le ha cambiado la vida y con el que quiere cerrar una trilogía en la que habla de vida, lucha y muerte.

En una entrevista con Efe, Espinosa comenta que esta historia, con unos protagonistas que se rebelan contra un mundo que trata de ordenar su caos e imponerles unas normas, enlaza con El mundo amarillo y la serie Pulseras rojas , que le ha llevado a ser un fenómeno planetario, especialmente entre los más jóvenes.

«He querido —subraya— escribir mi Principito , un libro que me ha marcado desde que lo leí hace muchos años. Este mundo azul es un canto a saber quién eres, a arriesgarse, a apostar por lo distinto. Tengo la sensación de que mucha gente no encuentra el camino de vivir realmente cada día».

Es una ficción que nace de personajes reales que conoció en una semana de su vida, a los dieciséis años, en la que le dieron sólo un tres por ciento de posibilidades de curarse de un cáncer.

En esta obra, lleva a los jóvenes protagonistas a una isla con un faro y unos dragos milenarios que «siempre balancean a los niños malitos».

No esconde que para escribir el texto, que ha ido moldeando en lugares como Ischia (Italia), Lanzarote, Santiago de Chile, Menorca o Nueva York y que publican Grijalbo y Rosa dels Vents en catalán, ha buceado en su propio caos y lo ha intentado «querer».

Asimismo, ha impregnado de armonía las palabras, porque cree que la música es muy importante para la vida de las personas, igual que el amor, el sexo o los sentimientos.

En cambio, considera que nada de todo ello «se enseña en el colegio, donde debería haber asignaturas que hablaran a los más pequeños de amor, sexo, sentimientos y música».

Para Espinosa, además, todos «somos un instrumento musical». «En la indagación que he llevado a cabo últimamente —apunta— me he dado cuenta de que yo soy viento y que mi instrumento es la trompeta».

Por otra parte, no oculta que su intención ahora, además de conseguir que los lectores se hagan suyo el libro, es empezar a trabajar en el rodaje de una película sobre el relato y dirigirla.

En este punto, señala que tiene previsto iniciar en diciembre de 2015 con una productora española el rodaje, que tendrá como escenarios Lanzarote y la isla italiana de Ischia, con actores que quiere de diferentes países. «Esto me permitirá prolongar durante al menos dos años mi contacto con el mundo azul». Por otra parte, quiere escribir un guión con jóvenes de dieciocho años sobre cómo es en la actualidad la adolescencia y cómo se vive, con una historia que transcurrirá en un casino, un lugar que ve fascinante, «especialmente porque allí todo se consigue de forma inmediata».

Preguntado sobre si no está cansado de las narraciones y películas protagonizadas por niños y adolescentes, Albert Espinosa responde que no y que continuará escribiéndolas y rodándolas. «Mi Manhattan natal es el hospital donde estuve de adolescente», asegura en referencia a Woody Allen, que tiene predilección por filmar en este barrio de Nueva York.

En cuanto a su experiencia junto a Steven Spielberg en el rodaje de la versión estadounidense de Pulseras rojas , el escritor asegura que todo fue «fascinante» y que la situación «más brutal fue cuando Spielberg quiso ver la pulsera roja original que yo llevaba en el hospital y que siempre me acompaña en mis viajes —dice—». «Fue un momento poderoso, de grandes emociones», concluye.