Bellos ecos ideológicos y humanos

E l 3 de julio de 1965, los Beatles actuaron en la Plaza Monumental de Barcelona». A la actuación asisten dos jóvenes del pueblo de Los Yesares que se encontrarán con una situación dramática: mientras se desarrolla el concierto, un famoso policía del franquismo ejerce cruelmente su responsabilidad. Este es, sintéticamente, el contenido de la obra de Alfons Cervera. Y le sirve al autor de soporte para saltar en primera persona al pasado con un estilo alegórico de gran belleza. La dedicatoria y la referencia temporal anticipan el espíritu de la escena: «El pájaro come de tu mano». Todo pasa amparado con las reflexiones sobre el tiempo: «El tiempo convierte en ruinas lo que recordamos». El viaje de los dos amigos a Barcelona implica la incomprensión de los mayores. «Qué se te habrá perdido a ti con Miguel en Barcelona», comenta el padre. Pero... «escribo porque la música ya se acaba y este libro cuenta solo lo que sucedió la noche de un concierto de los Beatles en una plaza de toros rodeada de caballos…»

Coincidente con la crónica del viaje, avanza la narración de lo ocurrido en Los Yesares, desde donde esos muchachos van a Barcelona. Y lo esencial de la obra: «El cuerpo de Miguel lanzado al vacío como un fardo de ropa sucia», con la autocrítica del narrador: «Si esto es una novela, por qué hablo de tantas cosas que no pertenecen sólo a la imaginación de quien escribe. Y yo qué sé». Con la amarga referencia a la muerte de su padre aparecen las aclaraciones actuales. Sin olvidar el exilio que, irónicamente, pasa por alto el narrador. O la experiencia en el instituto de Burdeos, alusiva a la guerra civil: «El Valle de los Caídos no es sino la culminación faraónica de una gran mentira».

Todo para cerrar con el delicado comienzo de la obra: «La mano abierta donde dabas de comer al pájaro que se murió mucho después de aquella noche. Ahí empezó todo, esta novela o lo que sean estas páginas que duermen al raso de una intemperie donde sólo habita lo desconocido».