Cerrar
Publicado por
NICOLÁS MIÑAMBRES
León

Creado:

Actualizado:

Probablemente, la rana posada sobre la calavera en la fachada de la Universidad de Salamanca sea el detalle más popular de la rica arquitectura salmantina. A esa popularidad, gratuita sin duda, se une el enigma de su significado. Diversos investigadores se han ocupado del batracio desde distintas miradas culturales, pero su significado se resiste a una explicación certera. Es por ello por lo que la obra de B. García-Hernández resulta oportuna y sugestiva. Este eminente latinista, salmantino y alumno de esta universidad (catedrático de la Universidad de León en los años 1982-86 y, después, de la Autónoma de Madrid) se acerca al enigma con una mirada nueva, de rigor científico y, sobre todo con una perspectiva interdisciplinar. La Literatura clásica, la mitología griega y latina, la teología, la doctrina cristiana (y, en particular ciertas aportaciones del dogma, como la resurrección de la carne), la historia española-¦ forman parte del contexto en el que puede explicarse el significado de la rana. Todo ello sin olvidar múltiples referencias a las ranas, caminos a fin de cuentas que el autor recorre para descubrir ciertas claves. En todo este entramado cultural y antropológico tiene especial importancia el mundo de los judíos y de los judeo conversos, a quienes dedica el libro y a quienes alude desde el subtítulo con la expresión sefardí «cuando la rana críe pelos», que difiere en el uso del plural y del singular de la castellana «cuando las ranas críen pelo».

Algo que sin duda sorprenderá a los lectores es el recurso narrativo: la rana, en su humildad de batracio, es la narradora de toda una serie de complejas reflexiones y referencias culturales. Parra, la rana, va desgranando sus reflexiones, sorprendentes en muchos casos, discutiendo con Juana, la calavera, resto óseo de un eminente personaje de la historia española, o dirigiéndose a los visitantes de la fachada. Con la sabiduría que ha adquirido durante siglos en tan docta mansión, va descubriendo el enigma a través de curiosas concatenaciones culturales.

Articulado en tres partes, el libro desarrolla en la primera una visión desde el género de la fábula y las reflexiones teológicas. En la segunda, el complejo y riquísimo tapiz de la fachada universitaria va quedando explicado con detalle, mostrando cómo lo histórico, lo mítico y lo legendario tienen su presencia en la piedra dorada. La tercera parte adopta una perspectiva más moderna y científica, sin que falte una mirada ecológica. En el fondo, es un moderno «acto de fe en la evolución y conservación de las especies vivas y en el progreso de la ciencia». La «Apuesta final» viene a ser un corolario impregnado de un mensaje a los hombres, o, cuando menos, contra su soberbia. Se trata de una soberbia que los lleva a minusvalorar a ciertos animales y, sobre todo, a ciertos pueblos: «Yo me siento tan judía como mi creador; y a mucha honra». Es el mensaje crítico de esta rana que, sobre la calavera de un egregio español, reivindica la condición de un pueblo al que España no supo acoger.

De ahí la importancia de esa rana que (posada sobre la calavera de la historia) se expresa desafiante desde su posición preeminente. La cuestión del enigma y su entorno ha permitido a B. García-Hernández describir, por boca de la rana, el rico panorama de la confluencia de diversas culturas y diversos momentos históricos que se reflejan en la bella fachada plateresca.

Cargando contenidos...