Diario de León

Nos reconcilia con uno de los edificios emblemáticos

Publicado por
MARTA PRIETO SARRO
León

Creado:

Actualizado:

Palat de Rey. El palacio de los Quiñones, condes de Luna, y su entorno urbano

Margarita Torres Sevilla. Ed. Universidad de León, León, 2008. 184 pp.

Es probable que Margarita Torres, autora de este Palat de Rey. El palacio de los Quiñones, condes de Luna, y su entorno urbano , haya escrito este libro para intentar zanjar de una vez por todas las confusas noticias y verdades a medias que circulan profusamente sobre la historia de este edificio, el palacio de los condes de Luna, ahora recuperado por el Consistorio leonés tras años, demasiados, de olvidos. Puede parecer una provocación que yo resuma, algo graciosamente, su contenido indicando que, en realidad, el palacio de los condes de Luna no era inicialmente de los condes de Luna y que ya tenía una dilatada historia cuando llega a sus manos. Estoy segura de que con ello habrá quien de pronto sienta una curiosidad que solamente podrá saciar con su lectura. Chanza aparte, para mí ha resultado todo un placer ir descubriendo de la mano (y el discurso lógico y documentado) de su autora, aspectos que hasta el momento solamente intuía: que el palacio de los condes de Luna se encuentra en lo que fueron las cámaras reales altomedievales (probablemente construidas sobre el pretorio, como ya apuntó humildemente Raimundo Rodríguez Vega), después utilizadas como sede del Adelantamiento Mayor y residencia del oficial a su frente. Y que los Quiñones, condes de Luna, consiguen esta propiedad «a raíz del ejercicio de las funciones de Adelantado y Merino Mayor», oficio que inicialmente no era vitalicio pero que adquirirá esa condición a partir de Suero Pérez, desempeñándose a partir de entonces (estamos en tiempos de Enrique II) por «los cabezas de la estirpe de los Quiñones».

No es, evidentemente, lo único que aporta el libro en el que también se investigan las sucesivas aportaciones que los miembros de la familia van realizando en el edificio, que comienzan con Diego Fernández, quien encarga el artesonado de la estancia principal de la sala gótica, y continúan con la construcción de la torre renacentista, iniciada por el conde Claudio Fernández y rematada por Catalina Quiñones Cortés entre 1570 y 1575.

Todo un gusto, en fin, este Palat de Rey. El palacio de los Quiñones, condes de Luna, y su entorno urbano , que nos reconcilia con uno de los edificios más emblemáticos que conserva la ciudad.

tracking