la innovación. una puerta hacia el futuro

? Los expertos dicen que la crisis agudiza el ingenio. Al pie de la letra se lo han tomado en la empresa leonesa Levidrio (www.levidrio.com), cuya actividad se centraba hace años en el sector de la construcción pero que, en los últimos años, ha tenido que reinventar su actividad.

Así, esta compañía ha comenzado a diseñar, fabricar, comercializa y colocar el sistema de cerramiento de terrazas y otros espacios más innovador que existe en el mercado y que tiene origen alemán. De este modo, Levidrio se ha convertido en una de las pocas empresas españolas especializadas en sistemas correderos y plegables de vidrio sin perfiles de aluminio para terrazas, balcones, oficinas o espacios comerciales. Para ello, cuenta con maquinaria de última generación y personal cualificado para su manejo.

Así, lo explica la directora de Levidrio, María Martín Chaguaceda, la segunda generación de esta empresa familiar que comenzó su padre, Pedro Martín en el año 1979 con una pequeña cristalería en la calle Obispo Almarcha de la capital leonesa.

En la actualidad, esta fábrica cuenta con unas importantes instalaciones en el Polígono Industrial de Trobajo del Camino dónde se trasladaron en el año 2002, lo que ha permitido implantar los últimos avances tecnológicos. «Desde hace más de un cuarto de siglo, Levidrio se ha caracterizado por una constante evolución e innovación en la instalación y manipulación de vidrio plano», indica esta joven empresaria.

María Martín recalca la importancia que tiene la innovación para mantenerse en el mercado en los tiempos actuales, a la vez que considera que es imprescindible para atraer a nuevos clientes con otras necesidades.

El sistema Extendglass, que acaban de introducir en el mercado, tiene muchas ventajas. Entre ellas, su fácil manipulación y limpieza, la protección contra las inclemencias del tiempo, la creación y ampliación de espacios aprovechables, la instalación sin reformas constructivas, gran calidad de materiales y acabados, larga duración y resistencia al desgaste y perfecta integración en cualquier arquitectura, algo que eliminará los daños estéticos que generan, en muchos casos, los cerramientos en viviendas comunitarias.

Su negocio se centra en Castilla y León y Asturias aunque en breve abrirán mercados internacionales hacia Brasil, Chile o República Dominicana dónde serían los primeros en introducir este sistema de cerramientos allí desconocido. Una incursión que harán en los próximos meses ya que en la actualidad están realizando prospecciones de mercado junto con la Cámara de Comercio.

«Es elegante y discreto porque no rompe la estética, es seguro porque no se pueden abrir desde fuera y se trata de cristal templado antiroturas e intrusión, es aislante de los fenómenos meteorológicos adversos y es fácil de limpiar ya que es abatible y se abre desde ambos lados», asevera la directora de Levidrio. Un sistema innovador que permite realizar el cerramiento de vidrio en cualquier color y en forma poligonal, en ángulo o recto porque se ajusta a las geometrías más diversas.

Las mamparas de cristal se deslizan sobre un riel que permite llevarlas hasta un lateral. Allí se apilan con total seguridad ocupando un mínimo espacio. Ello ofrece la sensación de que el habitáculo es totalmente abierto. «Cuando se opta por cerrarlo la seguridad es del cien por cien», dice María Martín que añade que la participación en ferias y otros estudios de mercado han detectado nuevas necesidades que hace que se planteen innovar cada día.

El sistema consiste en un perfil superior de dónde «cuelgan» las puertas de vidrio. Esos perfiles se manufacturan de acuerdo a la anchura de las hojas y al ancho del hueco total.

En uno de los dos laterales , el perfil va perforado, de tal forma que las puertas, al llegar ahí, pueden desplazarse hacia afuera y quedar apiladas en el lateral. Para lograr esto, es necesario que ese vidrio sea un vidrio templado (o termoendurecido) que consigue tener la rigidez óptima que este tipo de movimientos exige. En cuanto al perfil inferior es mínimo y puede ir sobrepuesto o embutido en el suelo, de tal forma que cuando el sistema se abate, no quedará nada a la vista.

Pero además de terrazas o balcones, este sistema innovador también sirve para áticos o porches, lo que permitirá utilizarlo en todas las estaciones del año aprovechando también el calor del sol en invierno para calentar la estancia. También tiene gran utilidad en establecimientos hosteleros, para separar ambientes, en edificios públicos o espacios destinados a reuniones.

Un sistema que, además, es autolimpiable. Consiste en una aplicación que se realiza al vidrio y que actúa como un escudo sellando los poros de los vidrios para que resulten más fáciles de limpiar. Esta capa protege contra las manchas y contra la corrosión y se puede aplicar tanto a los vidrios nuevos como a los ya instalados.

María Martín también destaca que el equipo humano unido a la utilización de la alta tecnología permite que Levidrio «sea capaz de ofrecer un servicio de calidad» a todos sus clientes. Distribución, corte especializado, montaje de todo tipo de estructuras y un servicio especial de urgencia (reposición de lunas en viviendas e instalaciones comerciales) son algunos de los servicios que ofrecen, además de fabricar todo tipo de espejos, puertas de vidrio, divisiones de espacios o el forrado de paredes en vidrio blanco o de colores.

María Martín ya piensa en el siguiente reto que, en este caso, va encaminado hacia el diseño y la decoración. Tras los ladrillos de espejo llegan los muebles de vidrio.

Aunque lo más habitual es encontrar mesas de cristal, reconoce que las posibilidades son infinitas y ya tiene algunos diseños: un espejo que lleva una chimenea incorporada y sobre el que se proyecta la televisión, una escalera de cristal y luces de led o una cama de vidrio laminado... En definitiva, la nueva era de la decoración que se realizará aprovechando las características del vidrio templado.