la energía rompe barreras
diseñan una central solar termoeléctrica con tecnología de captadores de cilindro parabólico para emplear a discapacitados. Han combinado sus conocimientos en las materias de ingeniería, energías renovables y empresa. Cuatro leoneses y una joven china diseñan una central solar termoeléctrica quese ubicará en Santa Elena de Jamuz y que tiene la peculiaridad de que dará empleoa personas con discapacidad.
Federico Marbella, Raul Vicente García, Emilio Luis Gómez Marín, Chen Jiao y Francisco José Fernández Blanco.
Cuatro leoneses, relacionados con el ámbito de la ingeniería, las energías renovables y la empresa, junto con una joven china que está cursando el máster de Administración de Empresas en León, han ideado una central termoeléctrica que tendría su ubicación en Santa Elena de Jamuz, con la tecnología más innovadora y que sería un nicho importante para emplear a personas con discapacidad.
Francisco José Fernández, Emilio Luis Gómez, Raúl Vicente García, Federico Marbella y Chen Jiao son los autores de este proyecto innovador por sus características y sus fines y cuya viabilidad está avalada.
Decidieron combinar su experiencia en el ámbito de las energías renovables y en la responsabilidad social corporativa y de ahí nació la idea planteada «como un centro especial de empleo».
Tres eran las opciones: eólica, fotovoltaica y solar termoeléctrica, hacia donde se decantó la balanza debido al marco legal favorable existente, al número de empleos generados y a la novedad de la tecnología. «Ya habíamos decidido el tipo de energía así que sólo necesitábamos escoger la tecnología de captación solar y comprobar los perfiles de los puestos de trabajo que generarían y si estos podían ser cubiertos por personas discapacitadas», explican.
La central está diseñada con la tecnología de captadores de cilindro parabólico, ya que es una tecnología bastante madura y las labores de mantenimiento rutinario son fácilmente desempeñables por personas con alguna discapacidad.
Una central térmica normal quema un combustible fósil para generar vapor que, a su vez, pasa por una turbina que genera electricidad. En el caso de la central solar termoeléctrica no se quema ningún combustible y la energía necesaria para la generación de vapor se obtiene de la radiación solar.
Así será su funcionamiento. Los captadores concentran la energía solar de manera que se eleva la temperatura de un aceite térmico. Este incremento de temperatura, a través de un sistema de intercambiadores de calor, se emplea para generar el vapor que posteriormente moverá una turbina y generar electricidad.
El corazón de la planta sería el campo solar que está compuesto por una serie de espejos parabólicos.
En el foco de los espejo se coloca una tubería captadora por la que circula un aceite térmico que a medida que va circulando por la tubería captadora eleva su temperatura unos 280ºC , este incremento de temperatura se aprovecha para generar vapor que, a su vez, se emplea para mover una turbina que a su vez acciona un generador eléctrico.
En cuanto a las ventajas, describen que la más clara es que la fuente de energía de la planta es gratuita y de libre disposición; por otra parte no se generan gases efecto invernadero de manera que es una forma de generación energética eficiente y respetuosa con el medio ambiente. En cuanto al carácter innovador resaltan que este proyecto en sí ya lo es. De hecho, añaden que lo que lo hace realmente único es «la combinación de un centro especial de empleo con una central solar termoeléctrica», ya que hasta el momento nunca se había planteado la creación de un centro especial de empleo en una central de generación de energía.
Aunque su puesta en marcha requiere de un coste elevado, reconocen que sería rentable a corto plazo y tienen en mente iniciar en breve la promoción de este proyecto para hacerlo realidad.