la eficiencia de la tecnología

A sus 27 años, Diego Lorenzana lidera, desde el Centro de Competencia de HP, la gestión de aplicaciones para un cliente productor de materiales para la construcción en toda Europa, no solo en la parte de logística si no también partes tan imprescindibles en la gestión empresarial como finanzas, contabilidad o recursos humanos. Además, hasta el pasado mes de enero,trabajaba para una empresa multinacional de bienes de consumo a nivel mundial, en la parte de logística, interaccionando directamente con usuarios finales de bastantes países y teniendo que manejar diferentes situaciones con diversas culturas. El trabajo consistía en adaptar el sistema de la cadena de suministro (Supply Chain Management) a las necesidades de cada cliente. Este trabajo le sirvió para conseguir el Award de Bronce a la Excelencia al trabajo concedido por la misma empresa.

Este joven ingeniero informático leonés considera que las herramientas tecnológicas no sólo son imprescindibles para una buena gestión empresarial sino que está convencido de que más de una empresa no podría continuar su actividad sin ellas. «De hecho, en ocasiones me pregunto cómo podían hacer las empresas hace 50 años, que no disponían de las herramientas con las que contamos actualmente, para gestionar de manera más o menos eficiente las diferentes áreas del negocio. A mi juicio, un buen sistema de gestión empresarial marca la diferencia entre una buena y una mala gestión empresarial, es decir, entre una buena y una mala empresa, y no se debería ahorrar ningún coste en esto», argumenta.

En la situación actual, explica Diego Lorenzana, apostar por un cambio estructural del modelo productivo es esencial, y todo ello pasa por la innovación y por una mayor inversión en I+D+i. «Sólo de esta manera podremos incentivar que las empresas destinen una parte de sus recursos a investigación, creando más puestos de trabajo, mejorando la situación económica general del país», añade al tiempo que reconoce que el problema es que ahora mismo, las empresas tienen que dedicar la mayoría de sus esfuerzos casi únicamente en intentar sobrevivir, y así es imposible que puedan enfocarse en realizar inversiones en innovación.

En el contexto de esta crisis señala que se podría inventar una especie de sistema de donaciones para ayudar a las personas que más lo necesitaran, o a empresas que necesitaran acceso al crédito. Una especie de sistema de crowdfunding, o microdonaciones donde cada persona pueda donar la parte que consideren oportuna para entre muchas personas ayudar al resto.

Su proyecto fin de carrera fue elegido el mejor del año 2008 y desde entonces permanece vinculado a la sede que HP tiene en León.