lo que envuelve el confort
grupo fegar implanta un aislante. para edificios fabricado con plumas. de pollo y plásticos biodegradables. L as plumas de pollo y plásticos dan lugar a un aislamiento ecológico, un sistema revolucionario que Grupo Fegar comenzará a instalar en las rehabilitaciones de edificios. Esta empresa es pionera en el desarrollo de aislamientos térmicos, acústicos, ecológicos y eficientes destinados a las comunidades de propietarios y grandes industrias.
En plena crisis económica, Grupo Fegar se ha especializado en la rehabilitación inteligente de edificios, basada en el ahorro de energía y, por lo tanto, en la reducción del gasto gracias a la utilización de los nuevos materiales aislantes ecológicos e innovadores.
La empresa ha creado un departamento de I+D que se ha volcado el desarrollo de nuevos aislamientos térmicos y acústicos, ecológicos y eficientes, algo en lo que es pionera. Así, por ejemplo, un proyecto de Jordy Americh ha hecho que se hayan interesado por un aislamiento ecológico compuesto por compost de plumas de pollo y plástico procedente de material biodegradable. Así lo explica el director general de la compañía, Jaime Fernández, que augura que será un sistema revolucionario, en el que Fegar será innovadora a la hora de implantarla en las rehabilitaciones.
El desarrollo de este nuevo material está muy avanzado, dado que está a cargo de una gran multinacional que ha avalado la investigación. Se está tramitando una propuesta a nivel europeo, donde hay un consorcio de empresas interesadas en el material. Está previsto que en el año 2013-2014 lleguen al mercado los primeros sistemas de aislamiento de este tipo.
En cuanto a su ámbito de aplicación, se podrá utilizar tanto en obra nueva como en rehabilitación. En este último caso, no será únicamente el aislamiento lo que se instale, si no que será un sistema completo. «Esto es lo que vienen haciendo actualmente todas las marcas, lo hacen principalmente para garantizar la correcta aplicación del producto», indica el responsable de Grupo Fegar, Jaime Fernández.
El desarrollo de este aislante consiste, en primer lugar, en estabilizar el material de plumas de pollo. Para ello se elimina toda la materia viva para hacer que sea estable y no se descomponga, se trituran las plumas de pollo y se mezcla con plástico biodegradable. Después, una vez mezclado se introduce en un molde y se somete a una temperatura y a una presión determinada para que las partes se fusionen y se elimine el aire. Una vez frío se desmolda y queda el panel aislante.
Jaime Fernández también matiza que esta idea tiene su origen en un filipino que en el año 2007 inventó unos paneles compuestos por plumas de pollo y cemento, creando así unos paneles térmicos acústicos naturales. Un material que de momento no ha llegado a España y que en la actualidad se desconoce el estado de producción.
Esgrime que los principales sistemas de aislamiento que se utilizan actualmente en rehabilitación térmica, el componente aislante consiste en porexpan, lana de roca y, los mas innovadores, en mortero térmico, todos ellos con una infinidad de acabados desde mortero monocapa hasta estucos o imitaciones a granito.
Tiene constancia de que estudios en una rehabilitación térmica con cambio de ventanas incluido, hablan de un ahorro de mas de un 50% del consumo de calefacción y aire acondicionado. «Este factor depende mucho el año de construcción del edificio ya que según este podemos casi saber a ciencia cierta que tipo de aislamiento se utilizaba entonces», añade.
Estos son algunos de los sistemas novedosos que ha introducido Grupo Fegar. Jaime Fernández asegura que los comienzos en esta nueva área de mercado no han sido fáciles. Así recuerda que cuando se lanzaron al mercado de las comunidades de vecinos con soluciones constructivas de ahorro energético «la gente nos trataba de ingenuos, de arriesgados e ignorantes diciéndonos que eso nunca iba a funcionar y que perdíamos el tiempo». Sin embargo, añade, ha sido el tiempo el que, de momento, les ha dado la razón. «Teníamos que ahorrar energía, nuestro proyecto empezó a despuntar y tomar aún mas forma e importancia», resalta al tiempo que reconoce que Fegar fue pionera en presentar en el Ente Regional de la Energía la mejora en el envolvente térmico en Castilla y León.
«Gracias a nuestro tesón y entusiasmo por el proyecto y a que nunca tiramos la toalla, en la actualidad seguramente somos la empresa que mas conocimientos y experiencia tiene ofreciendo un amplio abanico de soluciones constructivas en mejora del envolvente», argumenta su director general. De hecho, en la actualidad, tiene en marcha importantes proyectos en empresas automovilísticas ubicadas en todo el territorio nacional y en grandes cadenas hoteleras de América Latina.
Por eso, Fegar creo un departamento especialmente en rehabilitaciones térmicas en edificios e industrias, apostando siempre por inculcar a los propietarios que rehabilitar no es solamente estético, si no que tiene que ser eficiente y a ser posible utilizar materiales ecológicos en la rehabilitación. «El aislamiento es el único material que no se ve, pero se nota», reitera.
Otro material utilizado por Grupo Fegar, que es respetuoso con el medio ambiente ya que está compuesto de materiales naturales y ecológicos, es el corcho proyectado. «Un gran desconocido», dice. Aunque lleva casi 15 años en el mercado, «los arquitectos no tenían conocimiento de las cualidades de este material, y hemos sido pioneros en su introducción en el mercado de León, Asturias y Galicia». Está compuesto principalmente de corcho y resinas que consiguen la cohesión entre las virutas de corcho, haciendo de este material una pasta homogénea para su posterior aplicación.
Este material permite soluciones de aislamiento como puede ser el encapsulamiento del amianto para tejados de uralita sin necesidad de levantar la cubierta. Además, en el interior de las viviendas, se logra una mejora acústica, consiguiendo así una mayor intimidad y confort en el domicilio «no escuchar a los vecinos».
Otra solución constructiva que ofrece el corcho proyectado es la eliminación de condensaciones que se producen tanto en medianeras como en fachadas por falta de aislamiento.
En los esfuerzos por avanzar día a día en innovación, Fegar ha logrado encontrar otro producto ecológico que consigue eficiencia térmica. Se trata de un mortero de cal, que es el resultado de combinar un ligante como la cal, con inertes como la perlita, la vermiculita y las micro-esferas de vidrio huecas. Al añadir agua, se convierte en un mortero 100% mineral, noble, natural y ecológico, libre de sustancias químicas ó biológicas indeseables. El mortero de cal no produce sales nocivas, ni eflorescencias, debido a que la cal que contiene ha sido fabricada con materias primas de alta calidad.
Jaime Fernández fundó Grupo Fegar en el año 2007. Tras muchas dificultades y en plena caída de la construcción supo ver en las comunidades de vecinos un nicho importante de mercado que hoy le ha valido la permanencia y la consolidación en el sector.
Este empresario de La Bañeza recuerda que, desde los inicios, sus empresariales siempre han sido «intentar crear una gran infraestructura que permita destacar sobre el resto».