empresas y universitarios
En los países más desarrollados de Europa y Norteamérica, el «carpooling» es una práctica común desde los años 90. En España, sin embargo, no ha terminado de cuajar pese a que las primeras experiencias llegaron hace años, antes, incluso, de la crisis económica. Según los expertos en transporte, la razón de este escaso desarrollo puede encontrarse en el retraso de España en políticas de movilidad sostenible y, muy especialmente, a la desconfianza de la gente a la hora de compartir su coche con personas desconocidas. También aquí, esta empresa ha echado mano de imaginación y ha creado grupos cerrados (para la comunidad universitaria y para empresas) en los que se comprueba la identidad de cada persona y se exige, para inscribirse en alguno de esos grupos, un correo electrónico de un centro educativo o de una empresa.