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experta en bioconstrucción

DESIREé RODRÍGUEZ.. estudia cómo lograr hormigón eco-eficiente a partir de residuos de tejas o ladrillos.

Desireé Rodríguez es ingeniera Agrónoma e investiga en la Escuela de Agrícolas.

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nuria gonzález| león
León

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La Ingeniería de Biosistemas es una titulación novedosa ya extendida en Estados Unidos y que se está implantando con éxito en Europa. Se basa en la aplicación de principios científicos y tecnológicos propios de la ingeniería a la biología aplicada, las ciencias ambientales y las ciencias agrícolas. Los especialistas en biosistemas trabajan en áreas donde el equilibro entre el uso de los recursos naturales y la protección al ambiente es una prioridad. Por esta especialización se ha decantado Desireé Rodríguez Robles, una ingenieria Agrónoma leonesa que estudia el reciclado de los materiales de construcción, especialmente del hormigón. Por eso, en su tesis analiza la posibilidad de conseguir hormigón de calidad utilizando la fracción cerámica (ladrillos, tejas, sanitarios…) de los residuos de la construcción y demolición, en sustitución parcial de la grava.

«Todas las hipótesis apuntan a que este tipo de áridos reciclados serán adecuados en su uso como componente del hormigón, lo que daría lugar a una doble ventaja», señala Desireé Rodríguez.

Por un lado, el beneficio ambiental, de no verter los residuos al medio ambiente y encontrar una alternativa al recurso natural (grava) y así evitar una sobreexplotación del mismo. Por otro, la ventaja económica de la reutilización de residuos como recurso, que es un valor añadido.

Se trata de un proyecto coordinado, de tres años de duración, entre el Instituto de Ciencias de la Construcción Eduardo Torroja y la Escuela Superior y Técnica de Ingeniería Agraria de la Universidad de León. Explica que se consideran materiales eco-eficientes a aquellos que no perjudican al medio ambiente a lo largo de todo su ciclo de vida, desde la extracción de las materias primas, su fabricación, transporte y aplicación, hasta su reciclado o reutilización cuando su ciclo de vida útil se considere finalizado. Es por ello, que se puede considerar como hormigones eco-eficientes a aquellos que incorporan áridos reciclados en su elaboración.

Para llevar a cabo su proyecto, esta ingeniera Agrónoma realiza una evaluación de los procesos de tratamiento en plantas de reciclaje de RCD. Con los resultados obtenidos establecerá una optimización del proceso de tratamiento y una caracterización de los materiales cerámicos desde el punto de vista resistente para su empleo como hormigones estructurales. Finalmente, una vez que se compruebe la validez de este tipo de áridos reciclados, será posible buscar nuevas vías de aplicación como hormigones con propiedades acústicas y drenantes que se podrán utilizar, por ejemplo, en taludes en autopistas o en jardines verticales.