Diario de León

Móviles contra el fuego

Un profesor y sus alumnos desarrollan una aplicación para prevenir, avisar y calcular el coste de los incendios forestales. C omenzó como un ejercicio de informática en un programa de concienciación escolar y ya puede descargarse como la aplicación más completa sobre el mundo de los incendios forestales. Desde cálculo perímetros hasta coste de extinción, de solicitud de quemas a consejos para quemados e intoxicados, no le falta detalle.

El profesor Luis Vázquez ha dirigido las tareas del conjunto de alumnos que, cada uno en un apartado, han logrado desarrollar la aplicación.

El profesor Luis Vázquez ha dirigido las tareas del conjunto de alumnos que, cada uno en un apartado, han logrado desarrollar la aplicación.

León

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Hay versión en castellano y en gallego, y aunque su uso es generalizado puede «personalizarse» a la medida de cada autonomía o provincia, añadiéndole normativas y teléfonos concretos. Pero ya está disponible. Una aplicación para dispositivos móviles que se denomina Monte sin fuego, y que ha sido desarrollado por los alumnos del Instituto Francisco Daviña Rey de Monforte de Lemos. Alguno de ellos leonés, y bajo a dirección del doctor en Informática Luis Vázquez, que durante años desarrolló su labor en diversos departamentos de la Universidad de León.

La aplicación incluye marcación automática de los teléfonos de avisos de incendios y emergencias, una posibilidad muy útil porque, según Vázquez, está comprobado que muchas personas no saben a qué teléfono tienen que comunicar un aviso de este tipo.

También incluye información sobre cómo realizar las quemas controladas, así como contactos y formularios para solicitar los permisos. En este caso, con datos de Galicia, aunque pueden implementarse los de cualquier administración que lo demande. Porque las encuentas realizadas por los alumnos y profesores pusieron en evidencia igualmente el desconocimiento sobre os trámites a llevar a cabo para desarrollar estas actividades.

No tienen muy claro tampoco muchos ciudadanos qué hacer con una persona que se ha quemado o intoxicado con humo hasta que lleguen los servicios de emergencia. Y en el monte a menudo hay zonas fuera de cobertura que impiden conectar con estos servicios, por lo que resulta imprescindible conocer cómo tratar a los heridos.

La aplicación desarrollada permite calcular también la velocidad con la que evolucionará el incendio, utilizando una fórmula de un estudio publicado por el Centro de Investigación Forestal del Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria. «La velocidad se calcula en función de la velocidad del viento, la altura de la vegetación y la pendiente del terreno. Si no hay anemómetro en la ayuda de la propia utilidad podemos concectarnos directamente a la Agencia Estatal de Meteorología para obtener los datos de la estación de observación más cercana». La aplicación tiene un conversor de distancias; y puede obtenerse el calor desprendido de la altura de las llamas.

En cuanto al cálculo del perímetro y el área afectada por el incendio, se calculan las distancias con GPS. «Todos los alumnos conocen la existencia del GPS, pero si se prescinde de la utilidad como navegador de coche raelmente no somos conscientes de las muchas aplicaciones que tiene».

La idea es tomar puntos de referencia con el GPS, a lo largo del perímetro del incendio, y «con esos puntos vamos a ser capaces de generar una línea que marca el perímetro del incendio. A partir de ahí se realizan los cálculos para determinar la superficie».

La aplicación es capaz también de mostrar los servicios de emergencia cuáles son las coordenadas en las que se encuentra la persona que hace la llamada advirtiendo del incendio forestal.

Entre las informaciones con las que cuenta la aplicación destaca la que detalla las especies forestales, distinguiéndolas en tres categorías: las poco inflamables, que pueden ser utilizadas como cortafuegos naturales; las que son inflamables en verano y aquellas que siempre arden con facilidad y son de alto riesgo.

Además la aplicación desarrollada permite calcular el coste que supone la extinción de un incendio, a través de la introducción de información sobre el número y tipo de efectivos que participa en esas tareas.

Todo este proyecto surgió con un doble objetivo: por un lado hacer que los alumnos dquieran conocimientos de las materias de forma que puedan poner en marcha su utilidad práctica y social; y de otro «desarrollar la educación en valores y la inteligencia emocional» en un tema tan sensible como el de los incendios forestales. Por eso el desarrollo de la aplicación dentro del Proyecto Monte sin incendios, desarrollado por las profesoras María Jesús Casado y Esperanza Gesteira.

De hecho, de manera paralela al proyecto informático se han llevado a cabo diez blogs, en los que se incluyen desde entrevistas a alcaldes a experiencias en las visitas a las bases de helicópteros de las zonas donde se ha desarrollado el trabajo (Monforte de Lemos y O Rosal), así como concursos de carteles, vídeos, poemas, raps, una encuesta sobre fuegos forestales a más de 600 personas, conferencias de agentes de investigación de incendios forestales, desarrollo de juegos con Scratch,...

«A nadie se le escapa la importancia de los fuegos forestales, desde los daños que causan hasta el gasto que suponen. Por eso es importante para los jóvenes desarrollar actividades que activen su conciencia. Estamos convencidos de que buena de los incendios se producen por falta de conocimiento sobre el tema, por falsos mitos y creencias, por la ignorancia respecto a las consecuencias que tienen, tanto económicas como naturales».

La APP Monte sin fuego pretende pues «motivar a los alumnos en un proyecto actual, innovador, integrador y abierto a toda la comunidad educativa, para formar ciudadanos responsables». También concienciar a las comunidades educativas para promover la sensibilización sobre los montes y la relación entre los fenómenos naturales y sociales. «Es necesario contribuir activamente en la defensa, conservación y mejora de medio, partiendo de los ámbitos más próximos al alumno. Y todos los objetivos planteados intentan una mayor motivación de los alumnos en las materias y el aumento de la conciencia medioambiental, en este caso en un tema tan sensible como los incendios forestales».

Teoría, concienciación y práctica materializadas en una aplicación para móviles con Android que ya está disponible para todos los que deseen poner en práctica estas medidas de prevención.

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