Empleo. Otro rumbo para el trabajo
La Nertra ofrece una oportunidad a la industria de componentes y equipos. L a Nertra generará una nueva cadena de valor, nuevos fondos de comercio y nuevas expectativas. Nuevas profesiones, nuevos talleres, nuevas plantas de ensamblaje, nuevos centros de software en el ámbito local: más vida.
Los vehículos no tripulados y la tecnología serán piezas clave en el transporte de mercancías y la movilidad.
España está en exceso familiarizada con la importación de sus múltiples necesidades tecnológicas, desde la máquina herramienta a un televisor o teléfono móvil, pasando por una plancha. Puede decirse que España es una importadora compulsiva. Son tendencias muy difíciles de revertir porque la cadena de valor poco a poco se ha ido adaptando a las tareas y funciones que son necesarias para vivir como importadores netos.
La Nertra, por sus características, representa una oportunidad para empezar a revertir lo que ya se ha convertido en una costumbre inveterada y, sin embargo, muy lesiva para los intereses y necesidades de una nación como España, muy educada y bien formada, muy cualificada.
La Nueva Era del Transporte propone una nueva oportunidad a la industria de equipos y componentes, una industria, la española, muy potente, sofisticada y de gran liderazgo a escala mundial, en los actuales momentos al servicio de las grandes marcas industriales. Sus habilidades tendrán que redirigirse hacia nuevos propósitos industriales y una muy nueva y variada oferta de movilidad. Será un tiempo en el que reverdecerán muchos y numerosos talleres, fábricas medias y pequeñas y nuevos ensambladores actuando como marcas locales.
La expansión de las soluciones de ingeniería, algunas bajo licencia (propulsión, mecánica, hardware, software) y la expansión de estudios de diseño asistido para la modelización y prototipado, irán configurando y creando un nuevo tejido industrial, actualmente extinguido o bajo mínimos, que proporcionará nuevo brío a la actividad económica y social. La Nertra aporta una fuerte localización de todas sus actividades y una fuerte softwarización de numerosas soluciones.
Serán necesarias nuevas plantas para construir aeronaves, aviación ligera, electropropulsada, específicamente diseñadas para el transporte de mercancías en servicios regulares y para el transporte de pasajeros, aerotaxis. Habrá productos destinados a ensamblarse y fabricarse en el ámbito local. Los avances constantes en almacenamiento de energía, en baterías recargables, en sistemas de captación de energía solar, en rangos muy sorprendentes, que evolucionan a buen ritmo están ahora, al servicio de un nuevo patrón de movilidad.
La existencia de placas de integración de información de múltiples sensores, que incluyen la visión de 360 grados, ultrasonidos, lidar, radar o infrarrojos se añadirán a otras placas que incorporen la necesidades de comunicación de vehículos con otros vehículos, con sus operadores, con la RdC (Red de Consistencia) y con el centro de control. Y, sucesivamente, las placas que controlan los rendimientos mecánicos, propulsión, energía, estabilidad o tracción se añadirán modularmente, aumentando el peso de la electrónica.
La Nertra, a mayores, supone la softwarización del servicio. Creará numerosos interfaces para distintas tareas y usos, creará operadores cualificados en distintas misiones y como es bien sabido, el software, es un sector muy intensivo en consumos en recursos de capital humano.
Los nuevos ingenios, generan bases de datos, dejan memoria de sus trayectoria y poseen su propia caja negra. Como dispone de visión 360 grados e información complementaria de segundas y terceras partes, pueden auditar en tiempo real cualquier incidente, cualesquiera, aportando todo tipo de pruebas y datos, lo que sin duda, generará un nueva cadena de valor con profesionales capaces para instalar y operar con dicha tecnología.