TIC. La leonesa Ebury se sumerge en las fintech
la empresa especializada en servicios financieros radica en la City de Londres y lleva a cabo un estudio pionero. E bury, una fintech de servicios financieros especializada en pagos internacionales e intercambio de divisas para pymes con comercio exterior creada por el leonés Juan Fernández Lobato apuesta por las empresas fintech, que utilizan las tecnologías de la información y la comunicación para crear y ofrecer servicios financieros de forma más eficaz y menos costosa, para abrir puertas en las carreras de los jóvenes titulados en busca de empleo.
Ebury, declarada ‘Mejor fintech europea de pagos’ por la European Fintech Awards & Conference y con su equipo de Data reconocido con el premio Hacking Global Health que otorga la Fundación Bill y Melinda Gates en colaboración con la Open Data Science Conference, el foro que periódicamente reúne en varias ciudades del mundo a profesionales, expertos e investigadores en el tratamiento de datos, se ha sumergido en el estudio del mundo fintech.
La firma, que protagonizó en 2015 la mayor operación de financiación de una fintech en España y la tercera más grande de Europa, tras captar 77 millones de euros para acelerar su expansión, ha elaborado un estudio sobre el empleo en ete tipo de empresas.
«La mayoría de los trabajadores fintech se sienten muy satisfechos prestando sus servicios en este tipo de organizaciones de nuevo cuño, que entremezclan los servicios financieros y un potente soporte tecnológico como base de sus actividades. En concreto, el 46,5 % dice sentirse muy contento, lo que sumado a otro 47,2% que asegura estar bastante contento, arroja la percepción de que la experiencia laboral en este tipo de empresas es completamente satisfactoria. Además, el 84% de los trabajadores fintech se muestran convencidos de que trabajar en este tipo de empresas les abrirá las puertas de cara a futuros trabajos», aseguran los autores de este trabajo.
El informe elaborado or Ebury sostiene que los trabajadores fintech colocan en primer lugar la posibilidad de alcanzar «un desarrollo profesional en un ambiente joven y altamente dinámico —el 89,2%% señala este punto—, seguido por la posibilidad de lograr un crecimiento profesional más rápido (78,7%), acceder a conocimientos especializados (72,25%) y la oportunidad de hacer networking (72,05%).».
El estudio ‘Trabajar en el sector fintech. Percepción y expectativas de los empleados’ se llevó a cabo entre 300 empleados de la plantilla de esta compañía en Europa, con edades entre los 24 y los 30 años. La consulta incluyó tanto a los empleados con perfil tecnológico, que prestan sus servicios en las áreas de programación y desarrollo, como a aquellos con perfil no tecnológico, que desarrollan su trabajo en el área de ventas, mercados, marketing y riesgos. Sus resultados constituyen una de las primeras aproximaciones al conocimiento de los recursos humanos en las empresas financieras de base tecnológica, cuya aparición en el mercado data de algo menos de una década y a las que se asocia con la transformación del sector financiero en muy pocos años.
Más del 94% de los encuestados se muestran de acuerdo o completamente de acuerdo con que las fintech permiten a los jóvenes titulados una primera experiencia laboral bien remunerada en comparación con otros sectores y con posibilidad de mejorar las condiciones en un plazo relativamente corto. Además, el 85% cree que estas empresas son «más horizontales, con menos estructuras jerárquicas, y en las que la toma de decisiones es un proceso dinámico, más cercano y comprensible para los empleados». Los trabajadores fintech creen que en este tipo de empresas «todo el mundo sabe cuál es su papel en la organización y su aportación particular».
El 70% de los encuestados con perfiles no tecnológicos (licenciados y graduados en Economía, ADE, Derecho y otras titulaciones de Ciencias Sociales) asegura que al terminar los estudios universitarios nunca se plantearon como prioridad encaminar su carrera profesional hacia el mundo de las empresas tecnológicas, e incluso son más (el 81%) los que aseguran que en ningún caso figuró entre sus planes trabajar en una empresa fintech. Este valor desciende hasta el 39% en el caso de los empleados relacionados con el área tecnológica (informáticos, ingenieros), que aseguran también (el 96% de este colectivo) que nunca se plantearon trabajar en el sector fintech. «Resul ta elocuente del carácter novedoso de este sector y de su corta trayectoria», aseguran desde Ebury.
«En cuanto al medio que les abrió la posibilidad de conocer este tipo de empresas y solicitar una entrevista de trabajo en ellas, el 62% declara que fue a través de portales de empleo o empresas de selección, mientras que un 25% tuvo la oportunidad de llamar a sus puertas por la referencia de empleados o amigos en común. Sobre el tipo de competencias más valoradas para trabajar en una empresa fintech, los empleados colocan la capacidad de trabajo en equipo en primer lugar, seguida por la actitud de responsabilidad. En tercer lugar citan el idioma inglés y en cuarto el liderazgo», resumen los responsables de la empresa leonesa afincada en la City de Londres que opera en Reino Unido, Holanda, Francia, Bélgica, Alemania, Portugal, Irlanda, Polonia y España.
Contar con conocimientos tecnológicos es prácticamente irrelevante para los empleados relacionados con las áreas de ventas y operaciones de mercado (apenas dos de cada diez encuestados de este perfil lo consideran importante), mientras que para aquellos con perfil tecnológico (que prestan servicios en las áreas de programación y desarrollo) resultaría imprescindible. No ocurre lo mismo con el conocimiento sobre el campo financiero, que es valorado como una competencia importante por uno y otro colectivo. Para el 44% de los no tecnológicos constituye una materia relevante para trabajar en este sector, lo mismo que para cerca del 40% de los tecnólogos, según se recoge en este estudio.
«Las habilidades sociales constituyen un factor relevante para el 93% de los empleados no tecnológicos (aquellos que prestan servicios en el área de ventas y operaciones de mercado), mientras que su importancia decae en el caso de los tecnólogos (el 54% consideran esta faceta importante o muy importante)», concluyen en Ebury.
Las empresas fintech están cambiado en los últimos 10 años el panorama bancario mundial, y a la cabeza de esta transformación se sitúan países como Reino Unido y Estados Unidos, si bien se trata de un fenómeno que se extiende por todo el mundo. En España, operan más de 200 empresas fintech que dan empleo a más de 2.5000 trabajadores y que durante el año 2016 captaron 250 millones de euros de inversión. Las previsiones para este año indican que continuará el crecimiento, con las miras puestas en que, a finales de 2017, se hayan alcanzado las 400 entidades fintech en España.