ª1. El ingeniero que puede quedarse
Álvaro de la Puente Gil. Ingeniero de Minas y de Energía, tiene dos premios extraordinarios y hace su tesis gracias a una beca.
Pertenece al Grupo de Investigación de Sistemas Inteligentes de Gestión de la Energía y colabora en sus líneas de investigación con instituciones públicas, como el Ente Regional de la Energía (Eren) y empresas, a las que asesoran en gestión energética. En el grupo de trabajo de Álvaro de la Puente Gil, graduado en Ingeniería de la Energía, en Ingeniería Minera y máster en Ingeniería Minera y Recursos Energéticos, han desarrollado un sistema de gestión inteligente «completamente novedoso de plantas de autoconsumo, de aplicación en entornos domésticos o edificios industriales, que permite optimizar su aprovechamiento y minimizar los costes energéticos, un aspecto clave para su implantación futura de forma masiva en nuestro país», explica este joven investigador. «Estamos en fase de tramitación de la patente», añade Álvaro de la Puente.
Premio Extraordinario del Máster en Ingeniería Minera y de Recursos Energéticos y premio del Concurso de prototipos de la Universidad de León, De la Puente Gil está haciendo su tesis doctoral sobre el desarrollo y análisis de indicadores energéticos del consumo eléctrico de edificios públicos como hospitales, centros educativos y grandes edificios administrativos «que son consumidores intensivos de energía», explica. El objetivo: evaluar de forma práctica su eficiencia energética, predecir su consumo y gestionar de forma inteligente su consumo. «Para ello, combino desde las técnicas de tratamiento de cantidades masivas de datos, conocido popularmente como big data, hasta los últimos algoritmos basados en técnicas de inteligencia artificial y machine learning», explica.
A Álvaro de la Puente Gil siempre le gustó la ingeniería, especialmente todo lo relacionado con la energía y la electricidad, estudios en los que ha logrado un brillante currículum. Ha publicado en revistas científicas y también en libros y capítulos de libro. «En el último desarrollamos una herramienta de Información Geográfica (SIG) para el mantenimiento predictivos de grandes instalaciones fotovoltaicas», apunta este ingeniero.
«Dentro de la Innovación Docente, he colaborado en varios trabajos sobre la aplicación de la gamificación en la enseñanza en ingeniería o la evaluación objetiva, formativa y basada en competencias de Trabajos Fin de Grado y Máster, un asunto de particular interés en los nuevos planes Bolonia. Esperamos que los resultados de estos trabajos se apliquen pronto a nivel oficial en la universidad», añade.
Critica la falta de financiación «en la parte de investigación a nivel nacional y provincial en las universidades públicas». «En mi caso —añade Álvaro de la Puente— gracias a una ayuda de beca, concedida por la Fundación Cepa, puedo desarrollar mi actividad profesional en la universidad, pero somos muy pocos los becados, para la gran cantidad de trabajo que podría desarrollarse».
No ha pensado irse fuera. Cree que no lo necesitará. «Es cierto que, de no haber estudiado en la Universidad de León, seguramente no quisiese quedarme a trabajar aquí, pero gracias al apoyo de mi familia y a la oportunidad que he tenido en la Universidad de León, puedo disfrutar de mi ciudad», concluye.