TIC. Rascacielos con pista para coches voladores
La torre Paramount Miami incorporará en su azotea un puerto aéreo para la próxima revolución: la aviación urbana. C on 60 pisos, 500 unidades residenciales y 213 metros de altura, la torre Paramount, que se construye en el corazón de Miami y se finalizará a mediados de 2019, estará coronada por un puerto aéreo de 280 metros cuadrados para «coches voladores» de aterrizaje y despegue vertical
Alrededor de una docena de compañías desarrollan pequeñas aeronaves de despegue y aterrizaje vertical (Vtols, por sus siglas en inglés) conocidos como drones para pasajeros, coches voladores o taxis aéreos, que podrán sobrevolar las ciudades en las próximas décadas, ya sea como vehículos particulares o como parte de flotas de servicios de transporte privado. Se espera que estos aviones eléctricos con múltiples hélices, menos ruidosos que un camión y más ligeros que un helicóptero, capaces de volar a más de 300 kilómetros por hora, y que podrán ser conducidos por pilotos o de forma autónoma, reduzcan drásticamente los tiempos de viaje y atascos de tráfico.
La carrera tecnológica entre los fabricantes para desarrollar y lanzar al mercado los Vtols se ha acelerado desde que la firma de transporte Uber anunciara sus planes de crear redes de taxis aéreos urbanos y de comenzar a probarlos vehículos en las zonas urbanas de Dallas-Fort Worth y Los Ángeles, en EEUU, y de Dubái, en Emiratos Árabes Unidos, a partir de 2020. Estos vuelos de prueba serán parte del proyecto UberAir, una red de taxis aéreos eléctricos que operarán en ciudades de todo el mundo y ofrecerán vuelos compartidos para cuatro personas, según Uber Elevate, una iniciativa destinada a explorar el futuro del transporte aéreo urbano bajo demanda mediante Vtols.
El constructor del emblemático rascacielos Paramount Miami Worldcenter , Daniel ‘Dan’ Kodsi, avista los coches voladores en el horizonte y se está preparando para recibirlos modificando el diseño de esta torre, de sesenta pisos, que se está construyendo en el centro de Miami, para incorporar un ‘skyport’ (puerto aéreo) en la azotea de este nuevo edificio.
«El futuro del taxi aéreo urbano está más cerca de lo que mucha gente cree», dice Mitch Snyder, presidente y director ejecutivo de Bell Hellicopter, compañía que forma parte de la red Uber Elevate y desarrolla la cabina para los Vtols de UberAir.
Dan Kodsi, no duda de que la aviación urbana está más cerca de la realidad de lo que cabría esperar y cree que los taxis aéreos comenzarán a llenar los cielos en los próximos 10 a 15 años, y por eso ahora está centrando sus esfuerzos en convertir la azotea del Paramount en un Skyport, una «pista de aterrizaje en el cielo para drones de pasajeros o coches voladores».
«El skyport en el edificio Paramount, de 700 pies (alrededor de 213 metros) de altura, reutilizará dos comodidades de esta torre residencial», señala Kodsi.
«Una piscina en la azotea se ha diseñado para acomodar un elevador hidráulico que opera lo que se conoce como un piso móvil o una piscina escondida, y el fondo de esta piscina se elevará a través del agua en cuestión de minutos para crear una superficie de aterrizaje de unos 3.000 pies cuadrados (cerca de 280 metros cuadrados)», adelanta Kodsi.
«Además, este skyport contará con un vestíbulo aéreo de 1.400 pies cuadrados (130 metros cuadrados), donde los residentes esperarán sus aerotaxis con la asistencia de un portero, y que inicialmente iba a ser utilizado solo como observatorio», señala el constructor.
Para este profesional inmobiliario especializado en planificación urbana, con antecedentes como piloto recreativo y constructor de más de 6.000 unidades a lo largo de treinta años de carrera, los vehículos voladores «son el futuro del transporte» y utilizarán el espacio aéreo «para aliviar la congestión y el tráfico a nivel del suelo y así hacer los viajes diarios más rápidos».
Estos vehículos se parecen a un helicóptero, pero son mucho más silenciosos, funcionan eléctricamente, son ecológicos y contribuyen a tener aire más limpio, según Kodsi.
«Imagine que viaja de Miami a Palm Beach, un viaje que ahora dura alrededor de dos horas, en aproximadamente 30 minutos. El tráfico intermitente hacia los suburbios podría convertirse en algo del pasado para los residentes en Paramount», afirma Kodsi.
«¡Y llegará el momento en que los residentes de Paramount Miami Worldcenter puedan tomar un ascensor de cristal para subir hasta la azotea privada de esta torre de lujo, donde los podrá recoger o dejar un avión solicitado previamente!» enfatiza.